Wilfredo Donet, el hombre que arregla uñas y rompe estereotipos en Cuba

​​​​​​​Wilfredo Donet vive en Palma Soriano, Santiago de Cuba, y ofrece servicios como manicurista desde 2017 a pesar de los prejuicios que despierta el oficio. Su esposa también ejerce esta actividad
Wilfredo Donet trabajando en su taller de manicurista. /Foto: Rachel Ramos. Facebook.
 

Reproduce este artículo

Wilfredo Donet es un hombre de Palma Soriano, en Santiago de Cuba, que ofrece servicios como manicurista desde 2017, reveló recientemente el periódico Sierra Maestra.

Según el trabajo, el hombre manicura tiene “gran aceptación entre las féminas”.

Rachel Ramos, periodista que firma el reporte, asegura que una mañana observó como “unas manos grotescas, colocaban con delicadeza un fino polvo de acrílico sobre las uñas de una clienta”, y ello la animó a realizarle un perfil al curioso personaje que ejerce un oficio tradicionalmente asociado a mujeres.

“En una sociedad tan machista como lo es la cubana, llena de tabúes y estereotipos que encasillan a la mujer en determinadas labores, un hombre decide cambiar la historia”, anunció la autora en sus redes sociales.

Antes que manicurista, Wilfredo Donet fue fotógrafo, motorista (transportista privado en motos) y otros oficios. Sin embargo su esposa, María Isabel Gómez, con quien lleva casado 15 años, lo inspiró a cambiar de profesión.

“Cuando comencé en esta labor, no imaginé que podría llegar a convertirme en todo un profesional, fui marginado y muchas veces tildado de homosexual, pero apoyar a mi esposa fue lo que me motivó a seguir hacia adelante”, dijo el hombre.

 

 

Manuel Pérez, uno de los entrevistados en Palma Soriano, consideró “bien” que un hombre arregle uñas…, “pero yo ni loco me sometería a realizar ese trabajo. El hombre tiene que trabajar en la mecánica y en la construcción”, dijo.

A otro entrevistado, Roberto Fernández también vio con buenos ojos la labor realizada por su coterráneo, pero ante la pegunta de si se atrevería a hacer lo mismo, respondió que no, porque “luego pensarán en el barrio que yo pertenezco al otro bando”.

El reportaje de periódico santiaguero, cuenta que en Palma Soriano existen mujeres cocheras, y otras que se dedican a oficios tradicionalmente asociados a hombre, como la carpintería, y la reparación de colchones y equipos electrodomésticos.

Sobre su esposa María Isabel, Wilfredo aseguró que, “lo es todo, es mi ayuda idónea, el motor que me impulsa a trabajar cada día y mira que fue difícil conquistarla, se me hacía la dura”.

El manicurista explicó que tanto él como su esposa se mantienen actualizados “sobre las últimas tendencias” de la labor que realizan a través de Internet.

De acuerdo con la información, Wilfredo invitó “a los hombres que lo deseen” que lleguen hasta su negocio para aprender el oficio, “hombres desprejuiciados claro”, añadió.

 

 

Relacionados