El régimen cubano renovó las instalaciones turísticas para la apertura del país al turismo internacional el próximo 15 de noviembre, a pesar del deterioro y colapso de las instituciones sanitarias a lo largo de toda la isla.
En un texto publicado por el oficialista Granma sobre esta decisión estatal de abrir las fronteras se informa que:
“Para la temporada alta (noviembre-abril), el país renovó las instalaciones turísticas y se diseñaron productos más innovadores, teniendo en cuenta la cultura, la historia y el patrimonio de Cuba”.
La asfixia económica que vive la dictadura ha impulsado esta disposición de abrir el país a los viajeros foráneos, incluso en el peor momento de la propagación de la pandemia.
Asegura el medio castrista que el proceso de vacunación va a ritmo acelerado y que “para el 15 de noviembre, se prevé que haya alcanzado al 90 % de la población, fecha señalada para la reapertura de otros sitios en la Isla”.
El ministro de Turismo cubano, Juan Carlos García Granda, informó sobre su sector en la Mesa Redonda de ayer jueves 9 de septiembre.
De un total de 111 mil 033 trabajadores unos 45 mil fueron vacunados ya, especialmente los que laboran en inmigración, aduana y transporte, señala la nota.
Colapsa sistema de salud cubano
La infraestructura sanitaria cubana comenzó a deteriorarse desde hace meses al reportarse el colapso de las instituciones hospitalarias en Cárdenas y Matanzas.
En esos territorios el régimen aprobó la llegada de vuelos provenientes de Rusia y el virus se propagó velozmente entre los pobladores.
El aumento acelerado de contagios se vive en cada provincia. Recientemente fue noticia que en el municipio Baracoa no existe capacidad hospitalaria para recibir a los pacientes positivos a la COVID-19.
El viernes 3 de septiembre varios residentes de una zona rural de Baracoa exigieron atención médica urgente a través de un video. Allí muchos presentan síntomas y no han sido atendidos ni diagnosticados.
En el vídeo un cubano contó que más de 50 personas se encontraban en ese sitio. Algunos hicieron una cola desde horas de la madrugada porque el día anterior los médicos llegaron sobre las 11 a.m.
“Baracoa necesita que alguien se enfoque en esto. La gente se está muriendo y no vienen a hacernos test. Toda esa gente que tú ves ahí está con síntomas”, recalcó el cubano y realizó un conteo de las muertes recientes en la localidad.
El pasado 7 de septiembre el galeno cubano Alexander Pupo Casas advertía en su cuenta de Twitter que “preocupa” la crisis epidemiológica del municipio Baracoa, en la provincia oriental de Guantánamo.
“Realmente preocupa la situación de Baracoa. El colapso de sus instituciones ha vuelto un calvario la situación de los pacientes COVID”, expresó el profesional de la salud.
El doctor Pupo añadió en su tuit que “los médicos no dan abasto, y no hay recursos suficientes para atender a los enfermos. Ayuda urgente”, pidió y escribió las etiquetas #SOSCuba, #SOSBaracoa y #CubaMuere.
En La Pasada, otra comunidad de Baracoa, cientos de pacientes positivos a la COVID-19, esperaban este domingo para ser transportados a Guantánamo.
Otro video facilitado a la redacción de ADN Cuba por Yoel Acosta Gámez muestra una multitud, con equipajes y ventiladores, a la espera y en el suelo.
Según el último parte oficial del Ministerio de Salud Pública Cuba diagnóstico 8 mil 394 casos positivos al coronavirus al cierre de ayer 9 de septiembre.