La Cámara Nacional de Radiodifusión (Canara) de Costa Rica exigió transparencia al gobierno del país en lo concerniente al acuerdo de colaboración que suscribieron el Sistema Nacional de Radio y Televisión (Sinart) de la nación centroamericana y el Instituto Cubano de Radio y Televisión (ICRT).
Mediante una carta dirigida al presidente tico, Carlos Alvarado, y los ministros del Consejo de Gobierno, el presidente de la Canara manifestó su preocupación y la de los asociados radiodifusores con el acuerdo bilateral y transfronterizo, “cuyo contenido y alcance desconoce esta Cámara, sus asociados y la población costarricense en general”.
“Conscientes como lo somos de los peligros que involucra aquella relación de nuestro Gobierno con el régimen cubano, de la manera más respetuosa le requerimos al señor Presidente de la República y a su Consejo de Gobierno, que se sirvan suministrarnos copia del acuerdo suscrito por el Sinart con el régimen que limita las libertades más fundamentales del pueblo cubano”, escribió Andrés Quintana en la misiva, donde también solicita al Consejo de Gobierno copia de su acuerdo que autorizó la suscripción del convenio de colaboración con el ICRT.
De no existir acuerdo alguno del Consejo de Gobierno y haberse tratado de un acto inconsulto y administrativo propio del Sinart y de sus autoridades superiores, la Canara pide que se disponga la "Nulidad Absoluta" del convenio con Cuba y se investigue “lo acontecido y las posibles consecuencias de lo ocurrido, sentando las responsabilidades que corresponda imponer”.
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A inicio de esta semana la Embajada de Cuba en Costa Rica informó que el Sistema Nacional de Radio y Televisión de ese país y el Instituto Cubano de Radio y Televisión (ICRT) firmaron un acuerdo de colaboración.
El anuncio hecho en redes por la legación diplomática cubana expresó que “nuestra cultura estará presente en la radio y la tv de Costa Rica”. La firma contó con la presencia de Jorge Rodríguez Hernández, embajador del régimen allí.
El diputado del país centroamericano Dragos Dolanescu manifestó su crítica y molestia con el convenio de cooperación, el cual establece el intercambio de contenidos audiovisuales y radiofónicos realizados por cada parte, así como la promoción y difusión de los contenidos intercambiados a través de las señales de televisión, radio, plataformas digitales y redes sociales.
“Otra vez este gobierno nos muestra su coqueteo con el régimen castrista para abrirles la puerta y permitirles la entrada a operadores políticos disfrazados de maestros, doctores o agregados culturales a suelo costarricenses”, señaló el diputado al diario El Mundo.
El legislador costarricense explicó que muchos exiliados venezolanos “nos vienen advirtiendo de las similitudes entre lo que pasó en su país hace un par de décadas y lo que está ocurriendo en Costa Rica”.
“Seamos precavidos, pues como dice el dicho costarricense: no hay almuerzo gratis”, concluyó.
