La activista pro derechos humanos Yanilys Sariego explicó, en su primer post luego de ser excarcelada, que el régimen cubano la procesará por los supuestos delitos de “desobediencia” y “resistencia” por hacer valer sus derechos como ciudadana.
Sariego se negó a asistir a las citaciones a interrogatorios que le enviaba la Seguridad del Estado en días previos a la Marcha Cívica por el Cambio.
“Fui detenida en mi domicilio el viernes 12 de noviembre, cazada como una terrorista; y después de varios interrogatorios y otros abusos, traslada en la noche hacia "El Técnico" en la ciudad de Matanzas” contó en un post de este 21 de noviembre.
Sariego realizó una huelga de hambre y sed durante su reclusión y narró estar “en shock por todo el poder que deja caer el aparato coercitivo de un régimen contra una ciudadana que sólo pide se respeten los Derechos Fundamentales de un ser humano”.
“Todavía debo enfrentar un proceso penal por Desobediencia y una posible Resistencia. Recuperar la confianza y mi tranquilidad de no tener que voltearme para ver quién viene detrás” relató.
También su publicación estuvo dirigida a la sociedad civil cubana que exigió su liberación junto a la de otros presos políticos.
“A todas las personas queridas, las organizaciones que me acompañaron durante estos días tan oscuros de mi vida donde casi pierdo la fe, los activistas y periodistas, en fin a todos esos seres maravillosos quisiera que existiera un sentimiento más grande que la gratitud sincera que les tengo.
Siento una profunda deuda con ustedes, la batalla que dieron por mi liberación es digna de admiración”, agregó.
El propio 12 de noviembre, luego de su arresto la organización Cubalex refería que Sariego se encontraba en la estación policial central de Cárdenas, ciudad donde reside.
La activista Camila Rodríguez llamó y le dijeron que no estaba detenida, sino que sería “entrevistada”.
“Según reportó Leandro Rodríguez, Yanilys fue secuestrada, en su vivienda, por la patrulla 422. Elementos de la policía entraron a su casa y la llevaron detenida” explica el post de Cubalex.
También el Centro para la Apertura y el Desarrollo de América Latina (CADAL) denunció la situación de incomunicación y la encarcelación de Sariego.
“El accionar estatal del cual Sariego resulta víctima se enmarca en la conducta sistemática de acoso, represión, persecución y encarcelamiento contra cientos de defensores de Derechos Humanos y activistas democráticos que el régimen cubano ha desatado luego de las protestas del pasado 11 de julio y de la convocatoria a manifestaciones pacíficas para el 15 de noviembre. Dicho accionar por parte del Estado cubano es flagrantemente violatorio de numerosas normas internacionales de Derechos Humanos” expresó en un comunicado la organización, cuyo trabajo también ha sido criminalizado por el régimen cubano en sus medios de propaganda.