La Unión Patriótica de Cuba (Unpacu) y la Alianza por la Libertad Global (GLA, en inglés) enviaron una misiva al secretario del Tesoro de EEUU, Steven T. Mnuchin, pidiendo sanciones contra 24 represores cubanos.
Según explicó el coordinador general de la organización opositora, José Daniel Ferrer, estos funcionarios del régimen de La Habana participaron directa e indirectamente en su arbitraria detención, así como la de otros miembros de la Unpacu.
Asimismo, quienes envían la misiva evocan la medida del presidente estadounidense, Donald Trump, llamada "Fortalecimiento de la política del Estados Unidos hacia Cuba", para emitir sanciones contra estos agentes.
Por su parte, la GLA trabaja con miembros de Unpacu y otros activistas para conformar la lista de presuntos responsables y prepara un expediente en cada uno de ellos para que el gobierno de EEUU los revise en busca de sanciones, visas y restricciones de viaje.
"Tenga en cuenta que en Cuba, enumerar nombres de esta manera es un delito grave contra la Estado, pero Unpacu y otros líderes de la sociedad civil están comprometidos con la causa de la libertad y asumir voluntariamente estos riesgos. Gracias por apoyar la causa de la libertad en Cuba y rendir cuentas", agrega la carta al Departamento del Tesoro.
Por último indican que "la designación de algunas o todas estas personas enviará un fuerte mensaje a movimiento de resistencia de Cuba que Estados Unidos apoya sus esfuerzos y también servir como una advertencia a los posibles abusadores para que lo piensen dos veces antes de participar en estos actos ilícitos".
Ferrer estuvo preso arbitrariamente desde octubre de 2019 hasta el 4 de abril del presente año y denunció torturas por parte de la Seguridad del Estado.
El líder de la Unión Patriótica de Cuba fue detenido el pasado primero de octubre, tras un allanamiento ejecutado por fuerzas combinadas del Ministerio del Interior, donde no presentaron orden de detención, ni de registro, ni acta de objetos confiscados.
José Daniel Ferrer, de 50 años pasó casi ocho en prisión como parte de los 75 disidentes encarcelados en la “Primavera Negra” de 2003.