Este 3 de marzo, la activista y emprendedora cubana Saily González amaneció con huevos rotos en la puerta de su casa, en la ciudad de Santa Clara, denunció en redes sociales.
"Cuando crees que los esbirros de la policía política no son capaces de más, amanece tu puerta así, llena de huevos que tiraron en tu puerta, porque simplemente tú disientes del régimen, lo llamas dictadura, crees que quien está al mando es un puesto a dedo sin casa y no tienes miedo de decir que EL SOCIALISMO ES MISERIA", comentó González en su Facebook este jueves.
Por último, la activista cubana dijo que "sueño con una Cuba donde este tipo de cosas no tengan lugar, donde el huevo, hoy escaso, no lo sea más, y se use para comer y no para llevar a cabo estas pantallas tan lamentables. Me pongo desde ya a limpiar mi puerta".
González publicó una imagen en redes sociales donde se ven varios huevos rotos en la puerta de su vivienda.
El 23 de febrero ocurrió lo mismo contra los activistas cubanos Roxana García Lorenzo y su pareja, Jonathan López, también residentes en Santa Clara.
"Miren cómo amanece la barbería. Con huevos reventados en la puerta, podridos, con un mal olor increíble", señaló Roxana, hermana del preso político Andy García Lorenzo, en un video en vivo de Facebook.
García Lorenzo aseguró que limpiarían y se incorporarían a su trabajo.
"No nos van a quitar la tranquilidad. Le digo a la Seguridad del Estado que no nos van a callar; dejen ya de hacer y deshacer con nuestras vidas como si fueran de ustedes. Nosotros no les pertenecemos", añadió.
Los activistas de Santa Clara son víctimas de represión por parte del gobierno cubano por exigir la liberación de los presos políticos.
Constantemente sufren estos llamados actos de repudio, impulsados por el régimen de la Isla contra opositores y activistas para intentar que abandonen su lucha.