Lo conocí en enero. Coincidimos en un viaje en gacela. Iba acompañado de su hermano de lucha Yoel Parsons. Por esos días eran los opositores de mayor visibilidad en las redes sociales. La entrevista: “¿Qué harías si fueras el jefe de sector del Consejo de Estado?” había roto los récords de likes.
Hoy Maikel Herrera se encuentra encarcelado en una unidad policial, acusado del delito de ‘desacato’ y con un proceso de instrucción penal abierto. Los hechos alrededor de su detención nos los cuenta Yoel Parsons.
“El día 16 de abril Maikel llega a su casa después de caminar siete kilómetros, producto de la suspensión del transporte por causa de la pandemia, y se encuentra que en su comunidad no hay corriente eléctrica. Enseguida se puso a dar una conferencia sobre el grado de irresponsabilidad del gobierno cubano en medio de esta crisis sanitaria y un oficial de la policía que se encontraba presente arremetió de manera agresiva contra el activista pacífico y defensor de los derechos humanos, empujándolo y gritando que no permitiría que hablaran mal de la revolución”.
“Maykel, que no conocía a ese señor, le contestó que él era un ciudadano libre y opinaba lo que quisiera. La discusión subió de tono y pasaron a los empujones y encontronazos, al instante vino una patrulla de policía y se llevaron a Maikel y a su tío Rodolfo Bones, que intentaba aliviar la tensión entre los contendientes”.
“Pasadas algunas horas fueron puestos en libertad, con una multa, pero al día siguiente regresó la patrulla y condujo a Maikel detenido a la estación de San Miguel, bajo la acusación de desacato directo y agresión a un funcionario público, es necesario subrayar que el tal funcionario público estaba en short y sin camisa y en estos momentos está sancionado por homicidio involuntario, por atropellar en su auto a un ciudadano en la calle.
“Quiero destacar la desinformación de las autoridades policiales a los familiares de la víctima, al no referirles el sitio donde se encuentra encerrado el activista y dar informaciones falsas de su paradero. Además, la imposibilidad de contratar un abogado. Para esa gestión se necesitan datos del proceso y la policía se niega a aportarlos”.
Sobre el carácter y la naturaleza contestataria de Maykel Herrera, su hermano de lucha Yoel Parsons destaca:
“Siempre está dispuesto a las calles, siempre con su discurso elocuente sobre su visión panorámica, exigente hasta ser insoportable. Quizás por eso no sea de los más populares entre la oposición, por su persistencia tras la corrupción policial enmascarada, valiente al dar conferencia en los lugares poblados. Es un hombre sin ambición política, solo desea que lo que le queda de vida sea una vida respetable como ciudadano, donde ser libre no constituya un delito”.
“En estos momentos está muy debilitado por la huelga de hambre que está haciendo y sabemos que la llevará hasta sus últimas consecuencias, sin importarle que sea VIH positivo, sin una buena salud que colabore con su empeño. Quiero recordar que cada vez que alguna víctima del régimen necesitó apoyo contra la injusticia, Maykel estuvo ahí, de primero. Y es hora que todos le reciproquemos su valentía, su incondicionalidad con la causa democrática y su entrega”.