El gobierno de los Estados Unidos, a través de su embajada en La Habana, exigió este lunes el fin de la “política cruel y discriminatoria” de no dejar regresar a Cuba a los opositores y activistas.
“El 25 de junio el régimen negó el regreso de Omara Ruiz Urquiola a Cuba. Solo en Cuba se ve encarcelar, acosar y negar la entrada a ciudadanos para castigarlos que expresen sus opiniones”, denunció en Twitter la Embajada de EEUU.
“Exigimos que pongan fin a esta política cruel y discriminatoria contra el pueblo cubano”, agregó la representación diplomática de Washington en la capital de la isla.
“Eliminen sus servicios consulares hasta que Cuba acepte a sus nacionales, eso es exigir”, respondió a la embajada el exiliado cubano Ángel Tur.
“Levantando las sanciones económicas de Trump y oxigenando la Dictadura, esas políticas crueles y discriminatorias contra el pueblo cubano nunca desaparecerán. Sean coherentes por favor”, afirmó el usuario de Twitter identificado como “Taoro” (@Taoro8).
La ONG Civil Rights Defenders (CRD) responsabilizó este 27 de junio a la aerolínea Southwest por impedir a la profesora de arte y activista cubana Omara Ruiz Urquiola tomar su vuelo con destino a Cuba.
CRD recordó que la compañía aérea privó de su derecho regresar a la isla a la académica, de visita en EE. UU. por motivos de salud, a pesar de que Southwest es signataria de protocolos internacionales que prescriben el respeto a los Derechos Humanos. Según la ONG, la Declaración Universal de Derechos Humanos asegura que “toda persona tiene derecho a salir de cualquier país, incluso del propio, y regresar”.
Ruiz Urquiola esperaba viajar a Cuba y reunirse con su madre la víspera, cuando recibió la noticia en el aeropuerto Fort Lauderdale, en Florida, antes de abordar el avión. “No me dejaron volar. Es otra empresa norteamericana que se pliega a la dictadura. Estos son los resultados del ‘engagement’, de hacer negocios con violadores de derechos humanos”, afirmó la activista en declaraciones desde el aeropuerto.
Ruiz Urquiola, una de las personas que se acuarteló en la sede del Movimiento San Isidro en noviembre de 2020 para exigir la liberación del rapero Denis Solís, fue a Estados Unidos a tratar el cáncer que padece, un objetivo que, dijo, “se cumplió”.
“Me recuperé y no me dejan regresar a mi casa. En Cuba lo tengo todo, no tengo nada en este país, nunca ha sido mi interés emigrar. Mi madre y mi tía me están esperando, mi familia, mi vida, mis animales, mi hogar, y sencillamente no me dejan entrar”, expuso.
Ruiz Urquiola responsabilizó directamente a la aerolínea y el gobierno estadounidense de que ella no pueda volar a su país, tal y como hizo la profesora de arte y activista Anamely Ramos en febrero, cuando American Airlines le impidió abordar el vuelo que tenía reservado para regresar a Cuba, a partir de la prohibición de las autoridades migratorias del régimen de la isla.
