Las detenciones arbitrarias en Cuba para castigar el ejercicio de las libertades de expresión y manifestación continúan al alza tras las protestas del 11 de julio y este sábado fue el turno del hijo y el hermano del pelotero villaclareño Jorge Luis Toca, quienes, junto a un amigo de la familia, fueron detenidos por salir a las calles de Remedios exigiendo libertad.
De la detención dio cuenta este sábado en Facebook el comunicólogo José Raúl Gallego, para quien la manifestación de los familiares de Toca y su amigo fue una muestra de que “la estirpe hala”.
“El hijo y el hermano del pelotero Jorge Luis Toca, junto a otro joven, salieron hoy pacíficamente por las calles de Remedios con un cartel en el que se leían las frases ‘Patria y Vida’ y ‘Libertad’. En estos momentos se encuentran detenidos”, escribió Gallego en su perfil en la referida red social, donde compartió imágenes de los manifestantes con el cartel.
“La represión no ha podido apagar el espíritu que se destapó el #11JCuba (11 de julio en Cuba)”, agregó el comunicólogo, que dijo haber confirmado la información con otras personas del municipio.
De manera similar, este domingo el periodista deportivo Francys Romero afirmó, también en Facebook, que por manifestarse pacíficamente ayer en Remedios fueron arrestados Jorge Luis Toca Jr., Javier Toca y Jerry Sammy.
“En la noche los confinaron a una prisión en Caibarién, según me dice el expelotero de Villa Clara y los New York Mets en MLB, Jorge Toca. Su hijo, su hermano y un amigo en común, detenidos por expresarse… La dictadura mantiene sus mecanismos para censurar todo pensamiento que sea diferente al establecido”, denunció.
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Según conteo de la organización no gubernamental Cubalex, que da asesoría legal a defensores de derechos humanos en Cuba, las personas detenidas y desaparecidas durante las protestas en la isla suman ya 480.
Por su parte, el Observatorio Cubano de Derechos Humanos, a partir de datos recopilados por su red de observadores en la isla, registra hasta el momento 560 detenciones y/o desapariciones de personas en todo el país.
El oficialismo acusa saqueos y actos vandálicos en las protestas, pero ha aprovechado para detener y procesar a manifestantes pacíficos, activistas y periodistas independientes, en explícito castigo y represión a la disidencia y el libre ejercicio de las libertades y derechos civiles, políticos e individuales.
