Este 11 de diciembre, como parte del reordenamiento monetario, la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba (ETECSA), anunció la nueva tarifa mensual, que comenzará a aplicar a partir del 1ero enero de 2021, para los clientes en tienen el servicio de Internet en sus viviendas (Nauta Hogar), mediante la telefonía fija, y desde las Áreas Públicas conocidas como zonas WI-FI.
"ETECSA informa que como parte de la tarea ordenamiento, se publican en la Gaceta Oficial de la República de Cuba las resoluciones ministeriales con las tarifas de los servicios de telecomunicaciones vigentes a partir del 1ero enero de 2021".
Más allá de los números que brinda la Gaceta Oficial de la República de Cuba al respecto, en su edición publicada este 10 de diciembre de 2020, un cálculo sencillo nos lleva a concluir que, si el precio de una hora de conexión será de 25 pesos, los clientes deberán pagar 18 000 pesos para poder disfrutar del servicio de Internet todas las horas de un mes.
Con las nuevas disposiciones el servicio de Nauta Hogar va a mantener sus cuatro modalidades de velocidad, cada una con diferentes tarifas, pero todas con una cuota única (base) de 30 horas al mes. Aquí hay que señalar que el acceso a Internet es considerado por las Naciones Unidas un derecho humano, según una resolución aprobada por ese organismo internacional, para la "promoción, protección y el disfrute de los derechos humanos en Internet".
Pero si bien desde hace algunos años el régimen permitió que los cubanos tengan opciones para conectarse a la Red de redes: primero los parques y zonas WI-FI, luego el servicio de Nauta Hogar, y más recientemente el acceso por datos móviles, aún son muchos los que no pueden hacerlo por no contar con los recursos económicos, primero porque los salarios que paga el castrismo son bajos, y luego por que los precios de Internet son muy caros. Cuba tiene el Internet más caro del mundo, algo que con estas nuevas medidas económicas, se va a encarecer más aún.
A lo anterior hay que sumar que cuatro ofertas de diferentes velocidades sujetas a distintos precios, separa a los cubanos en cuanto a poder adquisitivo, algo que es lo más parecido a la división de clases sociales que el castrismo dice combatir.