En días pasados la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños (Anap) realizó una asamblea de balance en el municipio de Sagua de Tánamo de la provincia de Holguín, la cual suscitó un reportaje en el periódico ¡Ahora! de esa oriental provincia.
En su publicación el ¡Ahora! conversa con Iledaire Molina Hechavarría, quien es desde el año 2016, presidente de la Cooperativa de Créditos y Servicios Fortalecida (CCSF) Pedro Marrero, de la localidad de El Sopo, perteneciente al municipio de Sagua de Tánamo.
La cooperativa que dirige Iledaire Molina destaca por ser la de mejores resultados en la entrega de café y viandas en ese territorio y una de las mayores productoras en la provincia, pero aun presenta serios problemas con la transportación de las cosechas hacia los puntos de ventas, y carece de algunos insumos necesarios para las labores en el campo, según afirmaron campesinos presentes en la asamblea de balance de la Anap.
Con respecto al problema de la trasportación el director de la Pedro Marrero explicó que la situación está dada debido a que la cooperativa se encuentra en una localidad que está muy apartada de la capital municipal, no cuentan con el transporte adecuado y "los caminos están en muy malas condiciones".
"Quisiéramos tener en algún momento el transporte ideal para comercializar nuestras producciones en la zona, que es de difícil acceso y no puede ser cualquiera; aunque sabemos todas las dificultades que tenemos, pero es algo que anhelamos para perfeccionar cada día más nuestro trabajo". Expresó Molina.
Esta situación provoca que a pesar de ser el municipio de Sagua de Tánamo uno de los mayores productores de la provincia, solo logre acopiar el 28 % de sus producciones.
Iledaire Molina también se refirió a la carencia de algunos implementos necesarios para las labores en el campo.
"Necesitamos algunos recursos que nosotros no producimos, como las botas de goma, ropa y otros insumos que son vitales en la labor agrícola como machetes, lima que en ocasiones nos dan, pero no son suficientes y ante estas dificultades, se deben poner los implementos que existen en manos de los que de verdad producen".
Como es de conocimiento público la mayoría de los campesinos cubanos trabajan en condiciones similares a las de la edad media, carecen de los recursos mínimas en cuanto a herramientas y mecanización de las producciones, o no tienen suficiente acceso a productos para fertilizar los terrenos o combatir las plagas.
También en muchos casos los campesinos cubanos ven demorado el pago a sus producciones debido al terrible entramado burocrático que forma parte del andamiaje del estado.
