Seguridad del Estado cita a madre de periodista independiente Yoe Suárez

La seguridad de Estado cubana citó a la madre del periodista independiente Yoe Suárez para interrogarla sobre su trabajo como reportero
Foto tomada de su Facebook
 

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La seguridad del estado en Cuba esta vez toma revancha contra los periodistas independientes. Ya no les basta con detenerlos, confiscarles sus bienes materiales y de trabajo, cuestionarles su profesionalismo y sentenciarlos a años de encarcelamiento arbitrario. Ahora van más allá y arremeten contra los familiares de los reporteros que no aboguen a favor de la dictadura castrista.

Este es el caso de Yoe Suárez, reportero del Diario de Cuba a cuya madre se le ha informado sobre un citatorio para cuestionarle sobre el trabajo reporteril de su hijo.

Así lo hizo saber el propio Yoe en su perfil de Twitter. "Acaban de citar a mi madre dos agentes del Departamento de la Seguridad del Estado (DSE) en casa de una vecina, encargada de Vigilancia del Comité de Defensa de la Revolución. La citan para interrogarla sobre mi trabajo como periodista. ¿Comienzan las prometidas “consecuencias”?"

Suárez ha sido colaborador de ÁRBOL INVERTIDO, publica en Diario de Cuba (DDC) y El Estornudo, y ha sido finalista de la Beca Michael Jacobs en 2016. Ha publicado, entre otros, los libros de no ficción La otra isla (2016), Charles en el mosaico (Mención Premio Casa de las Américas, 2018), El soplo del demonio. Violencia y pandillerismo en La Habana (2018), y la novela No se juega con la noche (Hypermedia, Madrid, 2019). Coordinó Espectros (2016), primera antología de periodismo narrativo cubano. Obtuvo el Premio Nacional de Periodismo Cultural Villena en 2013 y 2017, y el Premio de Reportajes de la Editorial Hypermedia 2017 y 2018. Fue corresponsal en Cuba del canal estadounidense CBN News.

Recordemos que Yoe Suárez, el pasado 5 de febrero fue interrogado por la Seguridad del Estado en la estación policial del reparto Siboney, en el municipio Playa de La Habana, con el fin de avisarle que tenía una prohibición de salida indefinida del país. En la misma instancia se le amenazó con posibles reprimendas que podrían tener consecuencias para su hijo que cuenta con apenas unos dos años de edad y su esposa, si continuaba ejerciendo su labor.  

El interrogatorio de tres horas de duración fue realizado por un oficial identificado como Capitán Enrique, quien, entre las muchas preguntas y advertencias que le hizo, le comentó que “su problema no era ideológico, sino de resentimiento".

 

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