Salen a la luz privilegios de Viengsay Valdés, defensora del castrismo

El rechazo de intelectuales y ciudadanos a la defensa de Viengsay Valdés a la represión policial y de funcionarios castristas, también sacó a flote los privilegios de la bailarina devenida funcionaria
Salen a la luz privilegios de Viengsay Valdés, defensora del castrismo
 

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La bailarina Viengsay Valdés, sucesora de Alicia Alonso en las riendas del Ballet Nacional de Cuba (BNC), respaldó la respuesta violenta de funcionarios y la policía política contra los jóvenes que el 27 de enero se plantaron frente al Ministerio de Cultura. El rechazo de intelectuales y ciudadanos a su defensa de la represión, también sacó a flote los privilegios de la artista devenida funcionaria, entre ellos su matrimonio con Carlos Herrero, un empresario español con negocios en la isla “comunista”.

Según el diario oficialista Granma, la primera bailarina calificó los sucesos ocurridos “como un intento de orquestar una concentración”, y tildó las demandas de diálogo y libertad para artistas independientes y activistas como “claramente una provocación y una afrenta a nuestras instituciones y a Martí, un ser extraordinario que supo alertarnos de las peligrosas intenciones de Estados Unidos hacia Cuba y Nuestra América”.

“Para mí, está claro que no existía intención de diálogo, solo de crear disturbios contra el escudo de nuestra Revolución: la Cultura”, afirmó la directora del BNC. Sus declaraciones provocaron el rechazo de cubanos en las redes sociales, entre ellos varios intelectuales que criticaron su defensa de la represión.

 

Además, salieron a la luz otros detalles de su vida que marcan su fidelidad al régimen de la isla. La bailarina nació en la élite del castrismo, pues su padre, Roberto Valdés, fue entre 1967 y 1971 segundo Secretario de Cuba en Moscú y cónsul en Odesa. Desde 1975 y hasta 1979, fungió de embajador en Laos, donde nació Viengsay por la unión del diplomático con su secretaria y agregada en la embajada.

En la actualidad, es la esposa de Carlos Herrero, “miembro de la conocida familia de empresarios asturianos, trabaja desde hace décadas en el sector turístico”, según el periódico La Nueva España, que informó sobre la boda de ambos en San Juan (2013), Asturias. 

Cuando Viengsay Valdés sale a 'defender la Revolución', en realidad lo que está defendiendo es su modo de vida, que probablemente no se sostiene con su salario de Directora del Ballet Nacional”, denunció la artista cubana residente en Valencia, Salomé García Bacallao.

En el perfil en Linkedin de Carlos Herrero Franco, se consigna que es director de Wilton Properties Limited y tiene “más de 18 años de experiencia gestionando negocios de empresas extranjeras en Cuba”. También que domina “las leyes aplicables a las empresas extranjeras así como de la interacción con entidades estatales y gubernamentales”, y que es responsable de la “más de 15 contratos hoteleros negociados y de creación de empresas mixtas”.

García Bacallao Critica que “en una sociedad transparente, donde las empresas tuvieran que competir por contratos, y donde los cubanos pudiéramos crear nuestras empresas sin tener un pasaporte extranjero, ese nombre [Carlos Herrero] no podría seguir viviendo de explotarnos”.

Guy Chartier, el representante en Virgin Islands de la empresa que dirige Carlos Herrero, es un empresario canadiense con relaciones con compañías mineras, detalló la artista en su publicación.  

“Vaya usted a saber cuán profundo llegan esas redes de corrupción. Me pregunto, ¿cuánto pagan de impuestos en Cuba esas empresas que están todas registradas en paraísos fiscales?”, cuestionó García Bacallao sobre los negocios del esposo de Viengsay. También añadió que “detrás de un extremista hay un oportunista”, y sugirió que bajo el castrismo Cuba es una “neocolonia”.

Según La Nueva España, la pareja Herrero-Valdés se conoció en Cuba. Reseñaron que el padre de Viengsay, “fallecido hace pocos años, fue uno de los primeros embajadores en el extranjero del régimen de Castro, con varios destinos, principalmente en el sudeste asiático. La madre también pertenece al cuerpo diplomático, habiendo desempeñado el cargo de cónsul en diversos países”.

Cuando Valdés asumió la dirección del BNC, seguidores del ballet cubano y figuras prominentes de la danza, cuestionaron su designación. Tras sus declaraciones a favor de la represión policial y de funcionarios castristas contra jóvenes artistas y activistas que pedían pacíficamente un “dialogo” para exigir derechos fundamentales, este debate volvió a resurgir. 

Vania Vasileva más conocida como “Cuca Cambré” en el gremio de las arte, opinó en redes sociales: “Que bailó gracias a su esfuerzo, a pesar de su turnout que es la antítesis del ballet, estoy de acuerdo, pero de ahí a merecer ser la directora, discrepo. Es obvio que no había que no había nadie más. Por lo demás, que se puede esperar: es una oportunista, títere de la dictadura". 

 

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