Un total de 136 niños han sido tratados por coronavirus en Cuba, y su evolución ha sido favorable a partir del tratamiento aplicado, según datos de funcionarios del régimen en la Isla.
La doctora Lissette López González, jefa del grupo nacional de Pediatría del Minsap, dijo que como parte del tratamiento a los infantes se les suministró kalestra, la cloroquina y el Interferón, según una publicación de la página oficial de la Presidencia de Cuba.
La doctora López brindó las declaraciones en una reunión en el Palacio de la Revolución sobre el avance de la pandemia, y en la que estuvo presente Miguel Díaz-Canel Bermúdez, a la cabeza del régimen cubano.
Además de los expertos de Salud Pública, participaron científicos de varios sectores y con el grupo temporal de trabajo para la prevención y el control del nuevo coronavirus, agregó la publicación.
Añadió que globalmente la pandemia ya alcanzó a los dos millones 520 mil casos confirmados y una letalidad que ha ido aumentando hasta llegar al 7,01%, mientras que la Mayor de las Antillas acumula 1.235 casos y 43 fallecidos.
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En la reunión se reconoció la solidaridad de las personas recuperadas de la COVID-19, que han aceptado ser donantes voluntarios de plasma hiperinmune, para que se use en la terapia de quienes están de cuidados, graves o tienen una evolución no favorable.
Sobre el tema, la doctora Consuelo Macías Abraham, directora del Instituto de Hematología e Inmunología, informó que un paciente que recibió ese tratamiento se recupera satisfactoriamente y durante este jueves serían transfundidos otros más.
En el encuentro se volvió a confirmar que las medidas aplicadas por el Gobierno para contener la pandemia están dando resultados.
Sin embargo, el informe oficialista no mencionó los problemas de las aglomeraciones sucedidas en varias ciudades del país, suscitadas cuando la ciudadanía busca alimentos que llevar a la mesa, dada la escasez, y ello genera un riesgo de contaminación.
El 18 de abril ADN Cuba informó que usuarios de las redes sociales denunciaron la cola para comprar pollo generada en Camagüey, donde no se respetó el distanciamiento social.
