Luis Alberto García sobre carne de cerdo: “Se busca, se ha dado a la fuga”

El reconocido actor cubano, muy influyente y activo en las redes sociales se quejó de la escasez de la carne de cerdo en cualquier parte de La Habana
Luis Alberto
 

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El reconocido actor cubano, Luis Alberto García, uno de los rostros imprescindibles de la cinematografía cubana y muy activo en las redes sociales se quejó de la escasez de la carne de cerdo en La Habana en su perfil oficial en Instagram.

“Se busca. Se ha dado a la fuga. Altas recompensas por su captura”, escribió García al costado de la foto de una pierna de cerdo, casi que la única carne que se produce dentro de la isla, al menos al alcance del cubano de a pie y que actualmente no se encuentra ni en los centros espirituales.

A dicha publicación, reaccionaron varios usuarios con comentarios como: “Avisar si lo encuentras por favor”, “Ninguna fuga, se decomisan todas”, “Voy a guardar la foto para fin de año” o “En punto cero la puedes encontrar”.

Y en efecto, no es el primer cubano que se queja en redes de que no hay carne de cerdo en ninguna parte de la isla o la que hay es muy poca. “¿Ya están preparados mentalmente para Navidad y Fin de Año sin cerveza, turrones y con poco o nada de cerdo?”, escribió otro cubano en Twitter.

La carne de cerdo la más típica de las celebraciones navideñas cubanas ha desaparecido de los mercados estatales y su costo actual va en ascenso en todo el país. Por ejemplo, en Cienfuegos, en el centro del país, la libra ya sobrepasa los 60 pesos con carniceros privados cuando se encuentra. En mayo ya existían reportes del incremento del valor de este tipo de carne, en ese entonces la libra en la capital cubana ascendía a 80 pesos.

No obstante, en junio pasado el régimen permitió que unas 26 mil 455 toneladas de carne de cerdo se pudrieran en un frigorífico en la provincia de Ciego de Ávila, mientras el cubano de a pie no sabe qué inventar para comer.

Que artistas de renombre en la isla se quejen una y otra vez de la escasez de alimentos, medicinas o insumos de aseos, es una muestra inequívoca de que la necesidad y la miseria es lo que toca servir en la mesa del cubano a diario.  

 

 

 

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