Los turnos que revenden los "coleros" cuestan hasta 5 CUC en La Habana

Los "Coleros" son personas que no ven otra manera de ganar un poco de dinero que haciendo colas donde saquen algo que vender para luego revender estos turnos a quien pueda pagarlos. El panorama se complejiza cuando por un turno se piden hasta 5 CUC
Colas en Cuba hacen más difícil el enfrentamiento al coronavirus
 

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Haciendo acuse de recibo el pasado 25 de mayo el diario Juventud Rebelde volvió sobre la problemática de las colas en las tiendas y centros comerciales que expenden sus productos en pesos convertibles (CUC).

El diario estatal expuso una queja del ciudadano Pedro Pablo Roque Amorós, quien es vecino de la calle 178, No.110, entre 1ra y 5ta. Avenida, reparto Flores, Playa, La Habana, donde cuenta que allí, alrededor del mercado Caribe, desde horas tempranas de la madrugada, cada día se concentra un gran número de personas ajenas al barrio, incluso gente que viene desde otros municipios.

"Duermen en las escaleras de los edificios, detrás del Rincón Martiano del parquecito o en la costa, afirma. Anoche, por ejemplo, la Policía pidió carné de identidad, y había coleros de Regla y Guanabacoa, además de otros lugares distantes".

En su misiva dirigida al Juventud Rebelde, Pedro Pablo se queja también de que algunos, al no contar con un baño público en los alrededores, hacen sus necesidades fisiológicas en donde mejor pueden.

"Y, por supuesto, orinan y defecan en donde les dé la gana".

Pero la cuestión que motivó a Pedro Pablo a escribir es el hecho de que algunos, los conocidos por la población como "coleros", han visto en el desabastecimiento una manera de ganar algo de dinero.    

"Son coleros que venden cada turno en 5.00 CUC. Además traen cuatro o cinco acompañantes. La cuenta da unos 30.00 CUC. Además de vender los turnos, estos 'negociantes' también compran, para revender en sus barrios al doble del precio".

El hombre concluye su carta lamentándose de que a pesar de que estos hechos son de conocimiento público, nadie hace nada para evitar que continúen ocurriendo.

"Las autoridades municipales tienen conocimiento de la situación de las madrugadas en las afueras del mercado Caribe del reparto Flores. ¿A quién más hay que acudir para resolver esta situación?".

Lo lamentable de esta problemática en sí no es el fenómeno de las colas y los "coleros", lo lamentable aquí es el desabastecimiento de productos de primera necesidad, y de otros muchos, que desde hace ya algunos meses viene sufriendo el país, lo cual es el origen de esta situación, situación que a pesar de la pandemia de la COVID-19, parece no genera el interés suficiente para que las autoridades del régimen se motiven a darle una solución.

 

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