Al igual que con la escasez de alimentos, debido a la inoperancia del régimen cubano en el sector agropecuario, el país sufre también un agudo desabastecimiento de medicamentos, sobre todo los incluidos en los grupos de antiasmáticos, antihipertensivos, antibióticos orales y antialérgicos, entre otros.
Así lo reconoció Granma, voz oficial del Gobierno cubano, el cual, como ya se sabe, culpó de la escasez a la falta de materias primas para la producción local, debido al “el brutal bloqueo económico, comercial y financiero del Gobierno de Estados Unidos”.
Granma habló con el Dr. Eduardo Martínez Díaz, presidente del grupo empresarial BioCubaFarma; con la ingeniera Teresa Rodríguez Cabrera, vicepresidenta primera de la referida entidad, y con Rita María García Almaguer, directora de Operaciones, quienes afirmaron que de los 833 productos que la compañía suministra al sistema nacional de salud, al cierre de junio escaseaban 87 fármacos.
De los 833 medicamentos producidos por BioCubafarma, unos 349 medicamentos, el 56%, son parte del cuadro básico del país.
“Hay que reconocer que cuando se analiza la producción y distribución de medicamentos a través de los años, se observa una fluctuación en los niveles de abastecimiento, con situaciones críticas en algunos periodos. Al cierre del mes de junio, por ejemplo, había 87 en falta, lo que representa el 25 % de lo que produce BioCubaFarma”, dijeron los representantes de la compañía.
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Según Granma, desabastecimiento de medicinas se da en todas partes, incluidas naciones desarrolladas, pero un factor común es la concentración de la fabricación de materias primas en grandes plantas en China y la India. Y Cuando se afecta la producción en una de ellas, se crea desabastecimiento a escala global.
En el caso de Cuba, además del impacto de los problemas mundiales, “existen otras causas relacionadas con el brutal bloqueo económico, comercial y financiero del Gobierno de Estados Unidos. Dicha política nos afecta directamente en las adquisiciones de materias primas, reactivos, materiales de envase, piezas de repuesto, entre otros componentes necesarios para producirlos”, dijeron los ejecutivos.
Añadieron: “Los proveedores habituales dejan de suministrarnos materias primas, y se dificulta realizar las transacciones bancarias para efectuar los pagos a dichos proveedores, y para cobrar las exportaciones, que generan los ingresos con que compramos nuevas materias primas”.
También citaron las afectaciones con las navieras, que prolongan los tiempos logísticos.
De acuerdo con Granma, el régimen cubano también se vio afectado por la crisis del coronavirus.
«Durante la pandemia se agudizó la situación porque surgieron otros problemas. Por ejemplo, materias primas para 52 medicamentos que ya estaban financiadas quedaron en las fábricas y puertos cuando se cerraron las fronteras en muchos países”.
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Los medicamentos más afectados, por grupos farmacológicos, son los antiasmáticos, antihipertensivos, antibióticos orales, antialérgicos, antiglaucomatosos, antivirales, dermatológicos, diuréticos, escabicidas/pediculicidas, sedantes y ansiolíticos.
También se incluyen los antiácidos/antiulcerosos, la insulina y otros agentes antidiabéticos, los antisicóticos, los modificadores de la coagulación y los antitrombóticos.
El Gobierno cubano advirtió, por medio de Granma, que la escasez de medicamentos puede prolongarse.
“Si bien podemos afirmar que el esfuerzo que realizan los trabajadores de BioCubaFarma es extraordinario, por las razones antes explicadas, resulta imposible asegurar que en las próximas semanas y meses no se continúen presentando determinados problemas de desabastecimiento”, dijeron los ejecutivos, según el informe de Granma.
