El sábado 6 de febrero inició el aislamiento obligatorio para todos los viajeros que arriben a Cuba y los cubanos emigrados no residentes en la isla deberán pagar por la transportación, alimentación y alojamiento en hoteles del régimen, en una cuantía que puede llegar a rebasar los 900 dólares.
La medida, encaminada a frenar el tercer rebrote de COVID-19 en el país, establece distintos protocolos para el aislamiento atendiendo a si el viajero es turista, cubano emigrado o residente, y a si el motivo del viaje al exterior fue por interés estatal o personal.
En el caso de turistas, empresarios, técnicos y cooperantes extranjeros, así como el personal diplomático extranjero acreditado en Cuba, la prensa extranjera acreditada y las delegaciones oficiales que se aprueben recibir en el período, se aplicarán los protocolos aprobados por los ministerios de Turismo, Comercio Exterior e Inversión Extranjera, y Relaciones Exteriores, según corresponda.
Mientras, los extranjeros y cubanos no residentes que arriben al país serán aislados en instalaciones hoteleras designadas en cada territorio, asumiendo los viajeros el costo de estancia y transportación.
Dicho costo puede llegar a rebasar los 900 dólares, según se desprende de un cartel publicitario compartido este lunes en redes sociales por la agencia de viajes Guamá S.A. La información contenida en el mismo da cuenta de que como “precios especiales” para el confinamiento, los obligados a aislarse en hoteles pueden tener que pagar desde 225 hasta 769 euros (desde 270 hasta 925 dólares) por una habitación sencilla.
Ello, en dependencia de la instalación hotelera y siempre por persona y por una estancia de seis noches.
Las habitaciones sencillas más caras son las del hotel Parque Central (769 euros), seguidas por las del Meliá Habana (701 euros) y el Capri (610 euros). Las más económicas son las del hotel Tulipán (225 euros) y las del Versalles (257 euros).
Con excepción del último, radicado en la oriental provincia de Santiago de Cuba, y el Starfish Las Palmas, en Varadero, todos los hoteles publicitados por Guamá están en La Habana.
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En cuanto a las habitaciones dobles, las del Parque Central costarán 596 euros para cada huésped-confinado, y las del hotel Versalles y el Tulipán 210, siendo las más y menos costosas de las ofertadas, respectivamente.
Para los colaboradores de la salud y del resto de los organismos de la administración central del Estado, el aislamiento obligatorio establece que estos serán aislados en las capacidades creadas en La Habana y Matanzas. De igual manera, tanto estudiantes como becarios extranjeros serán aislados en las instituciones designadas para este fin por el Ministerio de Salud Pública y el de Educación Superior.
“El aislamiento de los cubanos residentes será en centros habilitados en las provincias y será libre de costo, así como el transporte hacia el centro y el regreso a su residencia una vez culminado el aislamiento”, precisaba la nota oficial que anunció el regreso de la medida ante el repunte de casos de coronavirus en Cuba.
