Un cubano residente en Florida, Estados Unidos, denunció que su hijo de 30 días de nacido en Jagüey Grande, en la occidental provincia cubana de Matanzas, debió esperar horas enfermo por la llegada de una ambulancia que le trasladase a la cabecera provincial.
La causa de la demora, según manifestaron autoridades y funcionarios a los que acudió la familia durante la espera, fue la falta de combustible, algo que el padre, identificado en Facebook como Yodany Donate, calificó de inaceptable.
“Mi chama (niño) desde las 6 am está con fiebre... No quiere coger la teta (mamar) y que en el cochiquero de Jagüey Grande lo remitan para Matanzas y desde las 6 no ha habido una triste ambulancia con gasolina para llevárselo”, denunció con indignación el padre, pendiente a 90 millas de todo lo que acontecía con su pequeño de un mes de nacido.
“Vete a ver los carros de los dirigentes y de los mandatarios, esos sí están llenos de gasolina, refresco y cerveza que para el pueblo no hay. Entonces mi hijo que tiene 30 días de nacido, que no puede hablar para decir que es lo que le duele, no”, contrastó Donate, aludiendo a las desigualdades existentes entre los cubanos comunes y los familiares y amigos de los miembros de la cúpula de poder del régimen.
En ese sentido, agregó que si se tratara del hijo de “alguien importante”, “rápido aparece hasta una limosina para llevárselo”.
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Por si fuera poco lo vivido por su familia y su pequeño, Donate expuso que su padrastro había ingresado un día antes en Colón para una cirugía y en el hospital no había cama. Lo pusieron a dormir en un banco de aluminio... “esa no es la cuba por la que mi abuelo luchó, sentenció, desmintiendo además que Cuba sea una potencia médica, como al oficialismo le gusta presumir.
En los comentarios al post de Donate, familiares y amigos de él residentes en Cuba detallaron que la ambulancia llegó para trasladar al bebé desde Jagüey Grande a Matanzas luego de más de 12 horas de espera. “Ojalá la demora no repercuta en la salud del bebé”, deseó una de las opinantes, mientras que muchos coincidieron en que casos como éste demuestran que la atención médica en Cuba es nefasta, distante de los estándares que se esperarían de una verdadera potencia médica.