En estos momentos Cuba atraviesa por una profunda crisis económica que incide en todos los ámbitos de la vida. A lo largo del territorio nacional se aprecia la escasez y el desamparo, algo a lo que no escapa el municipio especial Isla de la Juventud.
Este 9 de mayo el periódico estatal Victoria, perteneciente a la Isla de la Juventud, reseñó el gesto de una madre pinera que ha conmovido a su barrio.
Se trata de Celia Pantoja Arrechea, una joven que a pesar de la escasez no piensa solo en sus hijos pequeños y su familia, sino que se empeña en ayudar a los demás y compartir lo mucho o lo poco que tiene.
"En estos momentos difíciles en que debemos permanecer en casa mucho podemos hacer desde el hogar y el barrio para compartir lo que tenemos y hacerles la vida más grata a los niños, a los otros vecinos y a uno mismo, porque hace muy feliz sentirse útil y servir a los demás", confiesa Celia Pantoja orgullosa de la donación realizada a los muchachos de calle 32 interior, entre 3ra. y 5ta., en Sierra Caballos.
"Es algo sencillo, jugos naturales y tostadas que preparé para ellos con mucho amor con los recursos disponibles y la ayuda de mi familia", explica con humildad la también trabajadora que dijo estar "agradecida de los esfuerzos hechos aquí para proteger a cada persona, principalmente a los más vulnerables, como mi mamá Aida, que mantiene su tratamiento gratuito de hemodiálisis de forma sistemática en el hospital".
Con la ayuda de sus vecinos, y cumpliendo con las medidas para evitar los contagios de COVID-19, la joven entregó esos alimentos que con agrado recibieron los niños del barrio, entre ellos uno encamado.
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Celia asegura que va a continuar haciendo otras contribuciones porque, "la solidaridad es algo que no puede faltar en esta lucha que libra Cuba contra la pandemia".
Y es que así son la mayoría de los cubanos, siempre listos para ayudar a los otros a pesar de las dificultades. La solidaridad es algo que aún el régimen de los Castro no les ha podido quitar, a pesar de haberlos sometido a profundas penurias por más de sesenta años y a métodos de represión que buscaban y buscan dividir a las familias, los barrios y a la propia nación.