“Hacemos un llamado a todos los países para que se posicionen a favor del pueblo cubano y contra la represión”, declaró este 19 de julio la subsecretaria del Departamento de Estado de EE. UU, Julie Chung.
“Estados Unidos, junto con una lista creciente de países, apoya a cada cubano en busca de un gobierno que respete la libertad, los derechos humanos y la dignidad de sus ciudadanos”, agregó la funcionaria estadounidense.
El gobierno estadounidense fue uno de los primeros en pronunciarse sobre la revuelta popular que comenzó en Cuba el domingo 11 de julio.
Washington declaró públicamente que la represión era inadmisible a poco de conocer la noticia; un día depués, el presidente Joe Biden dijo que revisaría su política hacia Cuba a raíz de estos sucesos.
El 15 del mismo mes el presidente demócrata declaró que “el comunismo es un sistema fallido” y dijo que su gobierno está estudiando si tienen “la capacidad tecnológica de restaurar” el acceso a internet móvil en la isla.
Varios gobiernos han condenado la represión en la isla y exigieron al gobierno que respete el derecho a la libre manifestación. Entre ellos figuran los de Alemania, Canadá, Uruguay, Portugal, entre otros.
El Papa Francisco es la última de las personalidades que dio su apoyo a los manifestantes cubanos, al declarar la víspera: “estoy cerca del querido pueblo cubano en estos momentos difíciles”.
Las protestas comenzaron en Cuba en la localidad de San Antonio de los Baños (provincia Artemisa) y pronto se extendieron a más de 60 localidades del territorio nacional.
Hasta el momento, la ONG Cubalex, que da asesoría legal a defensores de derechos humanos, ya suma en su listado más de 500 detenidos y desaparecidos durante las protestas que comenzaron en la Isla este 11 de julio.
Hasta el momento, el gobierno cubano reconoció la muerte de una persona, Diubis Laurencio Tejeda, de 36 años y residente en el municipio habanero Arroyo Naranjo, de quien no se dieron las causas del deceso en la nota oficial.
Sin embargo, denuncias en redes sociales hablan de más muertos y heridos, información que no ha sido confirmada.
El pasado 16 de julio, la alta comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, exigió al régimen cubano la liberación de todos los manifestantes detenidos durante las protestas. También apostó por el inicio de un proceso de diálogo.