Usuarios en redes denuncian que el régimen quiere trasladar e internar a Lizandra Góngora en el hospital psiquiátrico de La Habana, conocido como “Mazorra”.
La denuncia fue realizada por la internauta Eloisa Alcolea, quien publicó en su perfil de Facebook: “nos llega información que Lizandra Góngora está siendo trasladada a Mazorra. Todos sabemos los riesgos que corre al estar ahí”
La historiadora de arte y activista cubana Salomé García Bacallao compartió la alerta en su perfil de Twitter y pidió a los internautas que estuvieran al tanto pues “los centros de psiquiatría se han usado históricamente en Cuba para torturar a disidentes”.
El Observatorio De Alas Tensas también se hizo eco de la denuncia por “su importancia” pese a que aún está “pendiente de ser confirmada”.
A inicios del presente año Lizandra Góngora, quien ha sufrido múltiples vejaciones en la prisión de mujeres El Guatao, envió desde la instalación penitenciaria un mensaje de aliento a quienes apoyan a las presas cubanas.
“Estoy mandando un fuerte abrazo de resistencia y agradecimiento a todos los hermanos patriotas que nos apoyan y nos recuerdan siempre que no estamos bien pero nos sentimos tranquilas al saber que todos ustedes están siempre con nosotros y no nos abandonan”, comienza la carta de la activista por los derechos humanos.
La activista, residente en Güira de Melena, fue herida en una pierna cuando se manifestaba frente a la tienda MLC el 11 de julio, durante las manifestaciones masivas contra el régimen cubano ese día. De allí huyó para evitar ser detenida. Estuvo escondida varios días, “sola” y “a la deriva”. Finalmente fue apresada y confinada en la prisión para mujeres del Guatao.
En diciembre del 2021 trascendió que Góngora era humillada dentro del penal por las autoridades carcelarias. Allí la desnudan bajo el pretexto de velar por la seguridad penitenciaria cada vez que recibe vistas del exterior.
Además, las guardianas de la cárcel tienen órdenes expresas de no conversar con ella y hacer como si no existiera. Agrega la fuente que la jefatura impide que reciba pertenencias enviadas por sus familiares y tampoco las devuelve cuando estos las piden.
Madre de cinco niños, a quienes dejó al cuidado de su familia, Góngora es la mujer que en las noches transmitía un cacerolazo por su Facebook mientras pedía libertad para los presos políticos y denunciaba todas las carencias con las que se subsiste en Cuba.