Protectores de animales denunciaron la aparición de perros callejeros envenenados el pasado 24 de enero en la ciudad de Santa Clara.
Los animales fueron encontrados en la zona conocida como El Ferrocarril, en fecha que coincidió con la visita del mandatario cubano Miguel Díaz-Canel a esa ciudad, informó Radio Televisión Martí.
Desde esta ciudad central de Cuba, la activista Leydi Laura Hernández lamentó la falta de una política de bienestar animal. La ley de protección para los animales debió ser aprobada por las autoridades de la isla, en noviembre de 2020.
“No tenemos evidencia de que haya sido el gobierno, lo que podemos asegurar es que siempre sucede lo mismo cuando llega Díaz-Canel: la noche antes, o recogen los perros o los matan envenenados en la calle”, agregó la activista.
En la primera manifestación independiente y de carácter no político autorizada en 60 años de revolución socialista, unos 500 animalistas cubanos marcharon el 7 de abril de 2019 en La Habana para reclamar una ley de protección animal.
Un año y medio después, el gobierno comunista, decidido a retomar la iniciativa de un movimiento que puede servir de paradigma en la lucha por otras demandas, dijo que aprobaría en noviembre 2020 su primera legislación sobre bienestar animal, aunque con excepciones.
Sin embargo, la iniciativa ha quedado en pausa. Se ha anunciado y dicho que se trabaja en ella con un grupo integral de expertos, pero la exclusión de los animalistas de la formulación de la política presagian que el futuro de los animales en Cuba puede seguir siendo triste.
