Un ciudadano cubano murió intentando salir de la isla por Ciego de Ávila rumbo a Estados Unidos, tras colisionar la embarcación en que escapaba con una de Tropas Guardafronteras (TGF), confirmó este miércoles el Ministerio del Interior (Minint).
En horas de la tarde del martes 1ro. de marzo, una lancha rápida recogió a un grupo de personas al norte de Cayo Coco, en la provincia de Ciego de Ávila, y luego tomó rumbo noroeste, refiere la nota del Minint difundida por la prensa oficial.
Una lancha de Tropas Guardafronteras persiguió al grupo y lo alcanzó “a 11 millas de Cayo Coco, dentro de las aguas territoriales cubanas, cuando la embarcación infractora se detuvo por aparentes problemas técnicos”.
Según las autoridades del régimen cubano, los pasajeros comenzaron a lanzarse al agua, por lo que la tripulación de TGF realizó “acciones de salvamento” mientras la lancha en la que escapaban los migrantes “reanudó la travesía”.
Agrega el Minint que “durante las maniobras marítimas posteriores, la lancha rápida y la nave de Guardafronteras, ambas de similar envergadura, colisionaron. Como resultado, tres personas que permanecían a bordo de la primera sufrieron lesiones, uno de ellos de gravedad, quien falleció en el trayecto de evacuación hacia tierra”.
En total fueron detenidos en el mar “21 emigrantes irregulares, cuatro mujeres y 17 hombres”. Según las autoridades, “en las últimas semanas se ha producido un incremento de hechos con empleo de violencia por parte de traficantes internacionales de personas, poniendo en peligro la integridad física tanto de los emigrantes irregulares como de los combatientes del Ministerio del Interior”.
Guardacostas cubanos disparan a balseros
A inicios de enero, un migrante cubano, interceptado junto a otros mientras abandonaban el país, denunció que los Guardafronteras disparan balas de goma contra los balseros.
Alberto López Montes de Oca contó a Diario de Cuba que durante la intercepción los oficiales gritaban “esto es a tiros con todos”, en clara referencia a quienes intentaban irse de la isla.
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En la noche del 26 de diciembre, el grupo de migrantes con el que viajaba López Montes de Oca fue descubierto y se negó a detenerse ante las exigencias de los guardacostas.
López Montes de Oca acotó que en ese momento fue "cuando empezaron a investirnos con la Griffith [buque de guardacostas cubanos] y es que se puso el de la escopeta de mazorca a menos de un metro de Yunier y la rastrilló diciéndonos que paráramos, a lo que contestamos que no, por lo que disparó en la frente a Yunier mientras el que estaba al frente de la lancha nos gritaba 'esto es a tiros con todos'”.
“Acto seguido la lancha nos pasó y fue cuando lanzaron la soga con la que se enredó uno de nosotros y partió el tubo de escape. La soga le raspó el cuello a uno de nosotros, que se quemó también un brazo con el tubo de escape, mientras Yunier sangraba por el disparo”, dijo.
También relató que los oficiales intentaron infructuosamente hundir la lancha de los migrantes. Estos cubanos fueron interrogados y multados por valor de tres mil pesos cubanos por su intento de fuga del país; además, han sido advertidos de no acercarse a playas o ríos.
El régimen cubano decomisó en 2021 más de 20 lanchas rápidas y arrestaron a 33 personas presuntamente implicadas en el tráfico de personas con destino a Estados Unidos que intentaron llegar a costas cubanas, informó el diario oficial Granma. En los primeros 25 días de 2022 fueron capturadas otras tres lanchas y siete personas.
