El anciano Pablo Piña Morales, residente en la ciudad cubana de Manzanillo, en Granma, sobrevivió a una caída bajo la alcantarilla este miércoles 30 de junio, a pesar de que fue arrastrado por las aguas aproximadamente un kilómetro.
Como “milagrosamente vivo” calificó el periodista José Ortiz Benet el estado de Piña Morales, que cayó este miércoles en una zanja y fue “arrastrado de forma subterránea por las aguas durante la tormenta local severa que afectó a este municipio” del oriente de la isla.
“Yo creo que no tardé ni 5 minutos en recorrer como un kilómetro por todo el alcantarillado y me puse un saco con basura en la cabeza para no pincharme un ojo o no darme golpes”, narró el hombre su increíble odisea subterránea.
No había salido de su asombro, cuando relató la historia a Ortiz Benet: “Cuando doblé ahí por la parte de abajo del mercado La Kaba lo que iba pa'llá era un avión y trataba de coger aire mientras podía hasta que después salí volando donde desemboca la alcantarilla cerca del mar”.
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El cubano sexagenario labora como hornero en la fábrica de galletas La Demajagua. “Luego [de salir de la alcantarilla] me montaron en un [automóvil] Lada y me llevaron al hospital”, agregó.
Pablo Piña Morales reside en la calle Pedro Figueredo, número 280, entre Tivolí y Girona. Su accidente ocurrió cuando iba a botar un saco de basura. Entonces resbaló y cayó a la ancha y descubierta zanja, o “cañada”, en la que otras personas también “han vivido situaciones similares anteriormente”, explica el periodista en sus redes sociales.
Ortiz Benet escribió que, tras conocer la noticia, los vecinos de Piña en su barrio de Manzanillo han ido a ver al sobreviviente “y le obsequian dinero o botellas de ron para que festeje su nueva fecha de nacimiento”.