Las autoridades sanitarias de Cuba reportaron este sábado el diagnóstico de 293 nuevos casos de COVID-19, en la primera jornada en siete meses en que no se registran fallecimientos por complicaciones derivadas de la enfermedad viral.
Desde el inicio de la pandemia en la isla, en marzo de 2020, los casos acumulados de coronavirus ascienden a 958.390, mientras que los decesos como consecuencia de la enfermedad suman 8.279, según las estadísticas del Ministerio de Salud Pública (Minsap), puestas en entredicho por cubanos dentro y fuera de la isla sobre todo en lo que a muertes y casos activos se refiere.
El Minsap detalla en su más reciente parte informativo que 6.482 personas permanecen ingresadas en Cuba con motivo de la COVID-19. De éstas, 1.801 son casos confirmados y activos, y 4.431 son sospechosas de un eventual contagio.
Camagüey se mantiene como la provincia de peor situación epidemiológica, con 61 nuevos positivos. En la jornada de viernes le siguieron Sancti Spíritus y Holguín, con 34 y 32 nuevos casos, respectivamente.
En los servicios de cuidados intensivos permanecen ingresadas 56 personas, de las cuales 15 están en estado crítico y 41 son reportadas como graves.
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Desde marzo de 2020, 948.253 personas se han recuperado en Cuba de la enfermedad causada por el SARS-CoV-2, según los datos del Minsap.
Los principales indicadores epidemiológicos van a la baja en la isla desde hace un mes y medio, luego de meses de un severo rebrote con jornadas de cerca de 10.000 contagios y decenas de muertes, que hicieron colapsar los sistemas sanitario y de servicios necrológicos en varias provincias.
La disminución precede a la anunciada reapertura plena de las fronteras del país, el 15 de noviembre, y al reinicio del curso escolar de manera presencial en diversas enseñanzas de la educación general.
El 70,3 por ciento de los residentes en Cuba que son población apta para ser vacunada contra la COVID-19, 7,97 millones de personas, había completado hasta el 11 de noviembre el esquema de vacunación con alguno de los tres inmunógenos de producción nacional aprobados por la autoridad reguladora para su uso de emergencia, ninguno de los cuales ha sido certificado por la OMS.
En algunos municipios se ha aplicado la vacuna de la farmacéutica china Sinopharm en su esquema de dos dosis, seguida de una tercera dosis de Soberana Plus, del Instituto Finlay de Vacunas de Cuba.