El trovador cubano Ariel Díaz criticó las nuevas medidas de las autoridades del régimen en la capital cubana, las cuales suponen un relajamiento de las previas, pero no de manera pareja para los distintos sectores.
“Hablemos francamente. ¿Por qué la insistencia en la reapertura de bares y locales privados que cumplan con ‘ciertos requisitos’? ¿Acaso esos requisitos no pueden cumplirse en un teatro, en un concierto, en un cine?”, cuestionó Díaz.
En un post en su perfil de la red social Facebook, el artista lamentó no haber visto ninguna alusión a la eventual reapertura de esos lugares, como en Europa, donde “lo primero que abrieron fueron los museos de arte”.
“¡Ah! pero como decía Sabina en El muro de Berlín: que viva la gastronomía. Las presiones son desde otros sectores que dejan entrever ya quiénes mandarán en el futuro de la nueva Cuba que se viene forjando”, agregó en clave irónica y crítica el trovador, que además instó al régimen a no emprender su propia Perestroika sin la correspondiente Glásnost.
Los términos aluden a las políticas emprendidas por el último secretario general del Partido Comunista de la Unión Soviética y primer presidente de ese país antes de su desintegración, Mijaíl Gorbachov, quien emprendió un proceso de reestructuración (Perestroika) del sistema comunista apenas llegó al poder en 1985 para hacerlo humano y democrático, a la par de otro que favorecía la transparencia (Glásnost) y el respeto a las libertades y derechos individuales.
Para muchos, como Díaz, el régimen sólo busca cierta reestructuración con las tibias reformas que ha emprendido desde 2008, pero ha omitido abrirse en materia de libertades, derechos y transparencia, y, a decir del artista, “¡así no se vale, asere!”.
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El gobernador de la capital cubana y vicepresidente del Consejo de Defensa Provincial, Reinaldo García Zapata, anunció el pasado miércoles 30 de septiembre en el programa oficialista Mesa Redonda nuevas medidas para La Habana, que suponen una relajación de las anteriores.
Además de la eliminación del toque de queda a partir del 1 de octubre y la reapertura de diversos establecimientos, aunque con aforo limitado, el funcionario detalló que se continuará con el teletrabajo allí donde sea posible, al tiempo que se reincorporarán a sus labores varios trabajadores para reactivar la producción de bienes y los servicios.
Asimismo, se valorará la vuelta al trabajo de las personas interruptas, aquellas que se encontraban sin realizar sus actividades laborales, pero percibiendo un determinado por ciento de su salario.
Las nuevas medidas eliminaron también la suspensión de circulación vial para vehículos privados, mientras que establecimientos gastronómicos privados y estatales como restaurantes y cafeterías podrán abrir al 50 por ciento de su capacidad habitual.
La prohibición seguirá vigente para bares y discotecas, espacios en los que suele haber mayor aglomeración, hasta que cumplimenten ciertos requisitos.
Por último, se permite nuevamente el disfrute de playas y piscinas, estatales y particulares, estas últimas utilizando el 30 por ciento de su aforo autorizado.
“Es todo un reto lo que viene ahora para La Habana", señaló el gobernador, que además subrayó que se mantiene suspendido y prohibido el transporte interprovincial desde y hacia La Habana, mientras que el intermunicipal reanudará sus servicios este sábado.