A mediados de este mes fue noticia que comenzarían los apagones programados en Cuba. A pesar de las medidas adoptadas por el régimen para reducir el consumo, la terrible escasez de combustibles para generar electricidad no ha permitido otro escenario.
Esto, en medio del desabastecimiento que prevalece en la isla y del azote de la pandemia de la COVID-19, no hace más que agravar la situación de angustia en la que viven los cubanos.
Los cortes programados comenzaron a ser una realidad desde el pasado día 14 en la provincia de Mayabeque, con el propósito de ahorrar combustible, pero se han ido extendiendo a lo largo de todo el país hasta este viernes 25 de septiembre en horas de la tarde, cuando la Empresa Eléctrica de La Habana anunció a través de su página en la red social Facebook "interrupciones por mantenimientos programados en el servicio eléctrico".
Los cortes por mantenimiento tienen el mismo objetivo que los que se realizan para hacer podas de árboles en la vía pública meses antes de que comience la temporada ciclónica: ahorrar combustible.
En esta ocasión la Empresa Eléctrica de La Habana informó "a los vecinos y entidades administrativas de: Marianao, Playa, Plaza y Boyeros que, por acciones de mantenimiento a nuestras instalaciones eléctricas, para el 26 de septiembre ocurrirán interrupciones al servicio eléctrico en algunos lugares de estos municipios en el horario de 8.00 am a 4.00 pm".
La nota detalla que por "acciones de mantenimiento", serán afectados Cempalab en Boyeros, las Avenidas 31 y 33 desde 122 hasta 144 en Marianao, las calles O-Infanta, Masón, Valle, San José, San Miguel, y San Lázaro, en el municipio Plaza de la Revolución, y las Avenidas 130 y 140 en Playa.
De igual manera informa que para el próximo día 28 están programados también otros apagones por acciones de mantenimiento que afectarán a los municipios de Plaza de la Revolución en las calles Paseo, Zapata, 2, A, B, 35 y 29. Asimismo en el municipio Habana del Este será afectada la Zona 10 de Alamar, y en Cotorro, el reparto Las Delicias.
La costumbre del régimen siempre que ha tenido problemas con el suministro de combustibles para la generación de electricidad es planificar los apagones en un primer momento entre las ocho de la mañana y las cinco de la tarde, al menos una vez a la semana, en diferentes zonas de cada municipio dentro de las provincias, y al parecer eso es lo que está implementando en el actual escenario.
