La Letra del Año estuvo entre lo más referido mediáticamente sobre Cuba en estos primeros días de 2020. Los consejos sobre la necesidad de disminuir el consumo de carne de cerdo, no usar prendas rojas ni con monos pintados y ser fiel fueron muy comentados, como también lo fueron las alertas de que podría haber golpes de Estado y más estallidos sociales.
Sin embargo, a juzgar por la conferencia de prensa de la Asociación Cultural Yoruba de Cuba (ACYC) del 2 de enero, la cobertura a las predicciones y consejos de la Letra no fue muy afín a las percepciones e interpretaciones de la propia organización, razón por la cual han mostrado su descontento.
Según el presidente de la ACYC, José Manuel Pérez Andino, citado por el blog oficialista Post Cuba, en la isla hay libertad religiosa absoluta y el Estado es transparente en sus relaciones con las religiones pertenecientes a su institución, a las cuales ayuda. En este sentido, Pérez Andino destacó la existencia de una Plataforma Interreligiosa que fomenta el diálogo y la paz entre los distintos cultos.
Sus aclaraciones obedecieron a las interpretaciones de la advertencia de golpes de Estado contenidas en la Letra del Año, que muchos medios refirieron como hechas para Cuba. El presidente de la organización religiosa, al responder a una pregunta en la conferencia sobre lo pronosticado en torno a los golpes de Estado, precisó que la Letra del Año y sus predicciones son para Cuba y el mundo.
Así, lo mencionado sobre los estallidos sociales y los golpes no aplica necesariamente para Cuba. Según el artículo de Post Cuba sobre la conferencia, firmado por Marco Velázquez Cristo, el presidente de la asociación yoruba expresó que hacia lo interno no ocurrirá nada. “Los problemas son en otros países”, ya que “en Cuba la religión y el Estado protegen y educan a la población”.
Asimismo, Pérez Andino afirmó que la ACYC “es patriota y que con el gobierno lo quiere todo y sin este no quiere nada”, mientras que Víctor Betancourt Estrada, miembro del Consejo de Mayores de la ACYC, comentó que en Cuba “el Estado educa, no tolera la delincuencia y trabaja por eliminar la corrupción”.
Con estos planteamientos referidos en el citado blog oficialista, los yorubas de la asociación se desmarcaron de los relatos de prensa que aducían predicciones de problemas sociales para Cuba, al tiempo que mostraron su descontento con los mismos.
