El 1ro de diciembre de 2009 Messi recibía su primer Balón de Oro con sólo 22 años. En la edición anterior el premio había sido para el otro futbolista que le acompañaría en esa carrera frenética durante la siguiente década arrasando con todos los galardones individuales existentes y por existir.
Ya en ese entonces Messi era el 10 del FC Barcelona, no tenía tatuajes (al menos visibles), llevaba el pelo largo y aplastado y su cara recién rasurada en cada partido. Lionel había sido el protagonista de un histórico "sexteto" que removió los cimientos europeos y colocó al crack argentino -definitivamente- en la cumbre del fútbol mundial.
Después de eso, Messi y Cristiano ganaron 4 trofeos (cada uno) entregados por France Football, para sumar 5 Balones de Oro por bando. En 12 temporadas solo Luka Modric fue capaz de interrumpir el "tuyo y mío" más alargado de la historia del balompié en nuestro planeta.
Lo de hoy, lo del sexto, ya no era una sorpresa para nadie, se sabía con antelación -incluso en Yo Hablo Fútbol lo adelantamos- que Messi obtendría el premio en París. Cambios repentinos en Casas de Apuestas, visitas sospechosas a Can Barça de periodistas y representativos de la revista francesa, la negación de Cristiano Ronaldo a ir a la Gala, el sexto Balón de Oro puesto con anticipación en un portal tan prestigioso como Transfermarkt, entre otras muchas pistas, que todas juntas apuntaban irremediablemente al argentino.
Y tengo que decir que eso pasa porque en la actualidad es muy difícil mantener en secreto por casi un mes (las votaciones se cerraron el 9 de noviembre) el resultado de un premio tan seguido. Yo creo que tanto la FIFA como France Football deberían pensarse lo de hacer las votaciones en vivo, o por lo menos una parte decisiva de ellas, para que estas filtraciones no le quiten emoción a la entrega en sí misma.
Lionel Messi se coloca, de esta manera, como el máximo acumulador de la distinción considerada como la más importante a nivel individual en el fútbol internacional. Rompe el abrazo a cinco que tenía con el portugués que, a pesar de ganar la Nations League, no le alcanzó siquiera para estar en el segundo escaño, puesto que ocupó el defensa del Liverpool Virgil Van Dijk.
¿Se merecía el premio Lionel Messi? Eso es un debate increíble y serviría para otra columna, por ahora déjame tu opinión en los comentarios...
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