Omar Quintero, conocido en Cuba como “el pagador de promesas”, aseguró en entrevista con el periodista oficialista Julio Acanda, que el dinero que le fue donado durante su caminata al Santuario del Cobre lo destinará a niños con cáncer.
A inicios de este mes, Omar Quintero perdió a su hijo Lázaro por un terrible cáncer. Este fue el motivo de su viaje al Cobre, para rendirle tributo a la Virgen de la Caridad. Quintero reveló que ayudaría a solventar las carencias materiales de algunos menores con la enfermedad.
"Voy a hacer muchas cosas lindas que él quería, y que yo también, a través de mi peregrinar, adopté muchos planes en mi vida, y quería compartirlos con él, pero desgraciadamente no está aquí. El trabajo que estoy haciendo lo verá desde el cielo", precisó.
Sobre la dolorosa muerte de su hijo a los 36 años, explicó que no esperaba ese desenlace. "Pensaba que ocurriría un milagro", agregó. No obstante, añadió que se quedó con muchos recuerdos lindos.
"Muchas cosas lindas de él, porque era un niño muy bueno, muy buen padre, muy buen hermano, muy buen amigo, especialmente muy buen hijo", añadió.
"Estoy ayudando a esos niños con parte del dinero que me donó el pueblo de Cuba, en medicinas, en aseo personal, cosas así, y lo voy a seguir haciendo hasta que Dios quiera. Para mí es un orgullo, después de haber terminado mi peregrinación, que Dios me haya asignado esto", siguió diciendo.
Concluyó que ese era su trabajo “hoy en día, ayudar a esos niños con cáncer, ofrecerles mi corazón, mi granito de esperanza, mi granito de fe, con mucho amor y mucho cariño, en mi nombre y en el de Lázaro, que esté orgulloso de su papá, de que esté haciendo algo bonito en beneficio de esos niños".
Lázaro Quintero Bermúdez, hijo de Omar Quintero Montes de Oca, conocido popularmente en Cuba como “el pagador de promesas”, falleció en el Hospital Oncológico de La Habana como consecuencia del cáncer que le aquejó en la última década.
Quintero Bermúdez cumpliría 37 años el 18 de junio. El pasado 19 de marzo se reencontró con su padre tras dos meses de travesía de este hacia el Santuario de la Virgen de la Caridad del Cobre, en Santiago de Cuba, al que acudió a pie desde Marianao, en La Habana, para pagar una promesa que hizo por la salud de su hijo.