El conocido actor cubano Jorge Perugorría conversó con el diario El Mundo desde la capital española sobre la situación social en Cuba y su protagonismo en la serie “Doctor Portuondo”, la primera serie original de la plataforma hispana Filmin.
En dicha ficción el actor da vida a un desterrado del castrismo. Su personaje es “un cubano que es un intelectual, pero practica boxeo y bebe. Un hombre que se graduó de medicina, psicología y se fue de Cuba a finales de los años 60 y en Estados Unidos aprendió el psicoanálisis directo”.
El artista agrega que su personaje añora una Cuba que ya no existe. “Es otro país, la isla cambió radicalmente. Ese glamour y ese paraíso están en la nostalgia de algunos privilegiados”.
Al cuestionamiento de que actualmente, cuál es esa Cuba, Jorge contesta: “Cuba atraviesa un momento difícil porque las reformas se han demorado mucho y es muy necesario hacerlas para salir de la peor crisis en años a la que se ha sumado la pandemia y la férrea política de bloqueo de Trump. Hay escasez de comida y medicamentos porque Cuba ha demorado esos cambios que tenía que haber hecho hace tiempo”.
El reportero insiste en la represión del régimen y el protagonista de “Fresa y Chocolate” acepta que en Cuba hay “gente que piensa distinto sigue presa y deseo que les liberen. El camino desde el Gobierno no debe ser reprimir, pero tampoco lo es el discurso de odio exterior”.
“La lucha para cambiar debe ser desde dentro. Muchos dicen que para ir adelante hay que romper, pero otros aspiramos a que el propio Gobierno evolucione sin llegar al caos, sin perder la institucionalidad y ponga en práctica las reformas que no permite desde hace 15 años. Los jóvenes intelectuales tienen que marcar el camino y eso es lo que le seguimos batallando”, añadió.
Finalmente el actor confesó que nunca se ha arrepentido de quedarse en la isla porque “me pude vincular al cine español y latino”. “Una película no puede cambiar un país, pero sí ayudar y marcar una tendencia. El cine cubano siempre ha hecho crítica y por eso quise seguir allí”, agregó.
“Si se aísla a Cuba no habrá un cambio, hay que empoderar a la sociedad civil y bajar el tono de los discursos de odio”, aconsejaba al final del intercambio con la prensa española.