La Guardia Costera encontró hace unos días una pequeña balsa para una sola persona cerca de las costas de Florida, donde solo había galletas, algunos dólares y el carnet de identidad expedido en Cuba de Carlos Luis Garay Lohuis.
Su familia cuenta la historia de este balsero, de 58 años, que por segunda vez se lanzó al mar desde la isla con la esperanza de encontrar libertad.
“Él vivió por 20 años en Estados Unidos. Llegó en balsa. Lo rescataron cerca de Cayo Marathon”, relató su hermana Alejandra Garay.
Según su hermana, el hombre tuvo ataques de nervios porque no lo dejaron regresar a Cuba a ver a sus hijos, por lo que se fue a República Dominicana, donde pasó mucho trabajo, hasta que lograron repatriarlo a Cuba.
Los familiares cuentan que durante esa época de “enfermedad mental” de Garay, tuvo algunos problemas con la justicia.
“Él se metió en el aeropuerto y dijo que el presidente George Bush venía a visitarlo. Por supuesto la policía lo intentó arrestar y se resistió. Fue entontes cuando compró un pasaje a Dominicana y no supimos de él por un largo tiempo, hasta que finalmente logramos regresarlo a Cuba”, añadió Alejandra Garay.
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Carlos Luis Garay regresó a la comunidad Santa María del Rosario, a las afueras de La Habana, pero un familiar contó que no logró adaptarse a la vida en Cuba ni al régimen político de la isla.
Aparentemente, se lanzó al mar en un intento por llegar nuevamente al sur de Florida sin contar nada de sus planes a su familia.
Su hija, Yajaira Garay, de 24 años, se trasladó hasta Miami con la esperanza de obtener más información sobre la búsqueda de su padre.
“Estoy desesperada. No sé si mi padre está vivo o muerto. Estuve intentando reclamarlo, pero luego llegó el COVID-19 y los trámites se complicaron. Le ruego a quien tenga información que nos ayude”, dijo la hija.
La Guardia Costera le aclaró a América Noticias que la búsqueda del hombre fue suspendida.
Carlos Luis Garay tiene cuatro hijos, dos en Cuba y dos en Estados Unidos.
Desde el 1 de octubre de 2020, los guardacostas han interceptado a 595 balseros cubanos en comparación con 49 migrantes cubanos del año fiscal pasado. Expertos aseguran que las cifras podrían aumentar ante la crisis económica y la represión en Cuba.