El joven Manuel de la Cruz, quien era profesor de una escuela y fue expulsado por participar en una actividad del Movimiento San Isidro, donde hacía de payaso, recibió el apoyo total de sus alumnos.
“Si ante mi expulsión del centro, según un "comité de expertos" que me declararon persona no idónea por mi "no alineación a los principios de la ética y política educacional cubana" mis estudiantes me responden así, no puedo retirarme más que con tristeza y orgullo, de saber que, como mismo dijeron ellos, fui y SOY intachable en mi labor de maestro”, escribió de la Cruz en Facebook, al costado de varias capturas de pantalla donde sus alumnos le escribían y apoyaban.
Sus alumnos dijeron que por medidas como estas en las escuelas se quedaban "sin maestros y también sin alumnos". Otros señalaron que perdían un buen profesor por las ideas políticas, pero había que seguir diciendo que Castro era un "buen comandante" y seremos como el Che", cuando este era un asesino.
“Mejor reconocimiento imposible. Por lo leído, ellos pierden mucho más. Y pienso que desde el corazón se te unirán muchos jóvenes. Patria y vida”, le comentó la usuaria Maida Toyo.
Mientras Julio Llópiz-Casal le decía que “con esas reacciones se aguanta el golpe mejor. El sistema se pierde a un profesor bueno, pero no deja de ser penoso realmente que los muchachos lo pierdan. Lo que pierdan ellos dejó de importar hace años. Ojalá tu vida siga alineada con lo que te propones, sea como sea”.
Luego de ser arrestado y recibir una multa de 3000 pesos, de la Cruz fue expulsado este 8 de abril de la escuela donde trabajaba. ADN Cuba se puso en contacto con él y este comentó cómo fue la lamentable situación en su centro laboral.
De la Cruz contó que sufrió algo así como una encerrona. En su centro de trabajo le leyeron una carta en donde le decían que no era idóneo para seguir cumpliendo la labor docente.
Su antiguo centro de trabajo era el Instituto Preuniversitario Urbano "Roberto Santiago Labrada Ávila", ubicado en el reparto Las Delicias, municipio Cotorro, La Habana. Allí impartía desde hacía tres años la asignatura de "Preparación Ciudadana".
Los mismos profesores que decretaron su expulsión le dijeron que su conducta en la escuela "había sido intachable". Esa afirmación convenció al joven de que la Seguridad del Estado estaba detrás de esta medida injusta, violatoria de todas las normas y leyes cubanas.
Como si en Cuba sobraran los profesores, el “comité” encargado de darle algún viso de legitimidad a este acto a todas luces ilegal, dijo que no poseía ya los requisitos “constitucionales” [sic], “legales”, “ideológicos” y “pedagógicos” para seguir siendo profesor.
¿Cuál fue el “pecado” de Manuel? Participar en una actividad para los niños del barrio San Isidro, vestido de payaso, que organizó el Movimiento homónimo. Como sabe el público, el Movimiento San Isidro se ha convertido en la bestia negra del gobierno cubano, y quien se acerque a ellos, en un “apestado”.
