Autoridades culturales del régimen cubano aseguran que permitirán estudios privados de grabación, luego de que este jueves estalló la polémica en redes sociales por su inclusión en la lista de actividades “prohibidas” para el trabajo por cuenta propia.
El Ministerio cubano de Trabajo publicó este miércoles la relación de 124 empleos que etiquetados como ilegales para los llamados “cuentapropistas”. Ámbitos especialmente importantes para el régimen por motivos económicos, o político-ideológicos, quedaron fuera del alcance de los trabajadores autónomos, que en este momento representan el 13% de la población ocupada en Cuba, según la agencia EFE.
ADN Cuba informó de un nuevo golpe a la música urbana, al incluir los estudios caseros de grabación en la lista de los 124 trabajos vetados para el sector privado en Cuba.
El punto 57 del mencionado panfleto, indica que está prohibida la “producción audiovisual y cinematográfica; actividades de grabación de sonido y edición de música, excepto la operación y/o arrendamiento de equipamiento para la producción artística, agente de selección de elenco (casting), auxiliar de producción artística”.
René Díaz, artista conocido como Elokuente MC, fue uno de los que protestó y señaló: “estudios caseros como Real 70 (entre otros) que son los que han registrado y registran la historia del rap, son arrojados de golpe a la ilegalidad. Por suerte no nos toma por sorpresa esta medida arbitraria, sabemos que l@s niñit@s de papá seguirán jugando en sus Home Studio impunemente mientras que nosotr@s en la sombra esperando que cualquier día llegue un troglodita a confiscarnos las herramientas. Al final la energía fluirá y el rap seguirá cosechando respuestas punzantes, somos la piedra en el zapato del Estado”.
Sin embargo, este jueves en la tarde el viceministro de Cultura Fernando Rojas, se apresuró a “aclarar” en el programa televisivo Mesa Redonda, que “hay una inexactitud en la lista que se publicó, relacionada con la grabación, porque sí se van a autorizar los estudios (…), estamos tratando eso adecuadamente con el Ministerio de Trabajo”.
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Al mismo tiempo, Mario Escalona, director de la importante discográfica estatal Egrem, declaró que la empresa está lista “para multiplicar los encadenamientos productivos con los Estudios de Grabación no estatales y continuar fomentando nuestro patrimonio musical”.
Escalona retuiteó una publicación de otro viceministro de Cultura, Fernando león Jacomino, quien expresó: “Habrán (sic) estudios de grabación no estatales. Se coordina con el Ministerio del Trabajo para adecuar la Ampliación del Trabajo por Cuenta Propia a favor de la grabación y post producción de sonido en todo el país. Una oportunidad para la promoción de nuestros músicos”.
Elokuente MC escribió en su Facebook, luego de conocer que el régimen reculó con el tema, que “parece que recapacitaron, o estaban jugando a meter presión para después fungir de buenas gentes, sabe dios”.
La Real, otra rapera cubana que había mostrado su preocupación, recibió con regocijo que fue “aprobado estudio de grabación por cuenta propia”.
En respuesta a su post, el periodista independiente Mauricio Mendoza, opinó: “Igual eso no es la solución. Todavía hay miles de sectores que se ven afectados. Además, estamos en Cuba, hoy te aprueban algo de fachada y mañana igual si no convienes te sueltan los perros. Y me pongo contento por los estudios, pero ninguna de esas leyes que limitan la libertad de creación expresión y prensa deben estar. Al final todos nos complementamos de una forma u otra”.
La actriz y modelo Leticia León, coincidió en que “eso hay que verlo en la práctica”.
“¿Le darán el mismo tratamiento al estudio de Edesio [Alejandro] o el de Manolito [Simonet], que al del barrio donde graba Maikel [Osorbo], por ejemplo?”, cuestionó.
Entre estas actividades que quedan denegadas, se incluyen los proyectos de prensa independiente, sobre la que no se advierte intenciones de flexibilizar. La “Sección J: Información y comunicaciones” del documento, puntualiza que las “actividades de agencias de noticias” estarán vetadas.
Por otro lado, en la “Sección R: Actividades artísticas, de entretenimiento y recreativas”, reiteran que no se autorizan las “actividades de periodistas”.
