Ha pasado un mes y medio desde la apertura de las tiendas en moneda libremente convertible (MLC) en Cuba el pasado 20 de julio, a las que solo se puede acceder con una tarjeta magnética que tenga dólares americanos, libras esterlinas, euros, o dólares canadienses.
El ministro de Economía, Alejandro Gil, aseguró en julio que la venta de alimentos en monedas nacionales se mantendrá; y al mismo tiempo, se abre la venta de productos de "media y alta gama" en MLC , es decir, divisas.
Según Gil, el objetivo es captar una "demanda solvente" en el país que puede comprar en dólares u otras MLC estas mercancías, obviamente, a altos precios.
No se puede olvidar tampoco que en la década de los 90, tras la caída de la Unión Soviética (URSS), la tenencia de dólares era penalizada en la isla. Quien los tuviera en su poder podía ir preso.
Explícitamente se crean dos bandos: a un lado de la acera, los cubanos de a pie que mal viven solo de sus salarios, y al otro, quienes reciben remesas del exterior. Hasta la fecha, reportes desde la isla indican que las tiendas en MLC están muy abastecidas, en comparación con las otras tiendas, para las que hay que hacer enormes filas y la compra es regulada.
Entonces, ¿dónde queda el discurso oficialista de la igualdad entre cubanos, pregonado por el régimen desde hace más de seis décadas?
El periodista independiente, Jorge Rodríguez, quien reside en La Habana, asegura que la retórica de la igualdad se fue al traste.
"Más que buscar la igualdad y una salida a la equidad que es lo que realmente debería avanzar, con estas tiendas el régimen le dijo adiós y abandonó a los sectores más vulnerables de la sociedad civil cubana: jubilados y personas bajo el régimen de asistencia social".
Rodríguez también considera que hay un tercer sector afectado: aquellos que no reciben remesas del exterior, los "sin remesas",
"Se ve un abismo social entre las personas que tienen familiares fuera de Cuba y quienes no tienen esta alternativa", añadió.
Sobre un posible malestar entre la población provocado por esta medida económica, el periodista explica que "la situación social que puede crearse ya está. La apuró la pandemia. La estamos viviendo. Lo que está viviendo hoy Cuba, insisto, no es creado por la pandemia, es anterior. Se agravó, pero ya existía".
Por su parte, la ex profesora del Instituto Superior de Diseño Industrial (ISDI), Omara Ruiz Urquiola, considera que el discurso de la igualdad entró en crisis desde la misma apertura al comercio y turismo internacionales en los años 90.
"Desde entonces fue evidente la fractura social en capas, más o menos privilegiadas según su proximidad respecto a la moneda fuerte (MLC), y teniendo en cuenta que solo la dinastía castrista tiene privilegios reales, no ya como clase, sino como casta. Ahora, en 2020, la evidencia de la realidad improductiva del modelo socialista cubano elimina las máscaras. Solo asistimos a la crueldad, a lo descarnado de una dictadura apurada financieramente, no pierde tiempo en los ambages necesarios que ya eran remanentes de la "guerra fría ", no hay que sostener la superioridad ideológica porque quienes la gestaron hace rato optaron por su derecho al aborto", agregó Ruiz Urquiola.
Al respecto de un estallido social, catalizado por estas medidas y por la crisis sanitaria de la COVID-19, la académica lo que avisora es un nuevo éxodo migratorio.
"La dictadura mutará, experimentada en esos lances está, si la presión de un gobierno republicano se mantiene. Pero solo será mañosa, para seguir el eterno juego de ilusión de avance cuando en realidad permanece inerte. De nosotros dependerá no volver a ser timados, ellos lo tienen claro, creo que nosotros todavía", concluyó.
La segunda versión de un experimento
El economista y ex profesor de la Universidad de La Habana, Omar Everleny Pérez Villanueva, respondió a una serie de preguntas de ADN Cuba que transcribimos a continuación:
La apertura de tiendas MLC, ¿qué beneficios trae para la economía cubana?
"Debemos aclarar que ninguna de las dos monedas nacionales son convertibles, ni el CUC ni CUP, es decir, con ninguna de las dos se pueden realizar compras en el exterior. La apertura de tiendas en MLC respondió al criterio de que la misma sí es convertible, y es la que permite comprar productos en el exterior para abastecer las tiendas. No es nada nuevo, funcionó así la economía entre 1993 y 2004. Después se prohibió su uso en los establecimientos y se sustituyó por CUC. Pero un mal manejo de los mecanismos establecidos en 2004, como el de romper la caja de conversión que respaldaba al CUC (por cada CUC en circulación había un dólar de reserva en el Banco Central), y no buscar otra regla para regular su emisión, se emitieron muchos más CUC que el respaldo que había que tener, entonces se decidió crear el CL, que era al final el valor que permitía gastarse por tener respaldo en divisas. Entonces las tiendas estaban con demanda de la población para adquirir determinados bienes, pero las mismas no tenían la moneda convertible para ofertar los bienes demandados".
"Debe tenerse presente que en 2019, apenas creció la economía cubana, aproximadamente el 0.5 %, se arreció el bloqueo a Cuba y Venezuela, que afectó la entrada de combustibles a Cuba, con los recortes correspondientes a la industria y la agricultura".
"Pero llego la COVID-19, y lo complicó todo aún mas. El turismo prácticamente desapareció a partir de abril del 2020, la zafra no cumplió el plan aprobado, bajaron las exportaciones, y por consiguiente se produjo un recorte drástico de las importaciones de bienes, y eso afectó la oferta de bienes a la población en los mercados liberados".
¿Hay otras medidas económicas más urgentes y efectivas que tomar? ¿Cuáles?
"Las medidas para que tengan la efectividad necesaria en el crecimiento económico, deben acelerarse, entre ellas potenciar aún más las fuerzas productivas privadas que existen en el país, donde un grupo importante de miles de personas ni quieren estudiar, pero no trabajan tampoco, porque no están incentivadas. Acabar de calendariar la entrada de las pequeñas y medianas empresas privadas. Implementar realmente la forma de administrar una empresa estatal y convertirla en una empresa pública, donde los obreros participen en las utilidades de las empresas. Adelantar la aprobación de la Ley de Empresas que está fijada para el 2022".
"Darle un uso productivo a las remesas, incentivar la llegada de capitales externos, sin menospreciar el de la emigración cubana".
¿Cómo encajan las tiendas MLC en el discurso oficial de igualdad económica entre cubanos que tiene décadas?
"Cuba tiene que cambiar el enfoque tradicional universalista, y pasar a una sociedad donde se reconozcan las diferencias, que ya existen, no es que el MLC las sacó a la luz. Debe pasar a un enfoque focalizado, de ayudar a los que no han podido o no podrán estar en un nivel superior. Preocuparse en ayudar a los que menos tienen, y no en los que lograron su ascenso.
"No me refiero a los servicios universales como salud, educación, cultura para todos, pero el nivel de asistencia del gobierno cubano es muy alto y muy subsidiado, entre ellos los alimentos. Evidentemente no estamos lejos de que desaparezca la libreta de abastecimientos subsidiada, y se pase a otra con otros precios, entonces el Estado debe aumentar los salarios y las jubilaciones, en un nivel que les permita adquirir la canasta básica resultado de la liberación de los precios a todos en la sociedad, no solo al que pudo despegar en las nuevas condiciones que se avecinan".
"Sé que es polémico las tiendas en USD, y no todos tienen USD, pero no había muchas opciones de corto plazo. La crisis económica que se sufre significa una crisis de liquidez externa. Pero desde la despenalización del uso del dólar fue así, unos recibían remesas y otros no, y esa era una de las fuentes principales de los dólares que circulaban entre 1993-2004. Lo que se produjo en esa época era un derrame de esos dólares en casi toda la sociedad, a modo de ejemplo eras carpintero, y no recibías remesas, pero entonces empezó a cobrar en dólares su trabajo, y así fue sucediendo, y creo que es lo que puede pasar de nuevo, porque no creo que el USD desaparezca rápidamente".
"En esa época en las encuestas de la situación económica de los hogares que se hacían por la Oficina de Estadísticas, referían que más del 60 % de la población, manejaba dólares. Y recordar que el trabajo privado no tenía la fuerza que tuvo después del 2010".