Roberto Campos tenía 13 años cuando decidió desertar con su hermano Raúl, un año mayor, al terminar un torneo internacional infantil en Santo Domingo, República Dominicana, en el verano de 2016.
En ese momento fue el beisbolista más joven de la historia de la pelota cubana que se fugaba de una delegación oficial de la isla.
Tres años después , Roberto acaba de firmar este 2 de julio un trato de tres millones de dólares con los Tigres de Detroit al abrirse la jornada de suscribir contratos con los talentos por parte de los clubes de la Mayor League Baseball.
Raúl lo había hecho en 2018 con los Marlins de Miami como paracorto dentro del grupo de siete jugadores de República Dominicana.
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Varios prospectos cubanos fueron firmados en esta fecha pero la historia de los hermanos Campos es la más llamativa.
Los especialistas de la MLB han llamado la atención que Roberto Campos no estaba en la lista de los 30 primeros prospectos de la MLB pero los scouts se mostraron impresionados con el potencial ofensivo del chico destinado a desplazarse en los jardines
Los escritores de la MLB señalan el misterio en torno a las estadísticas de Campos del cual no hay mediciones físicas disponibles públicamente ni fecha de nacimiento pero que ha obtenido uno de los bonos de firmas más suculento de la temporada.
Los hermanos formaban parte de una escuadra de La Habana que ya habían viajado a República Dominicana en 2015 y habían recibido calurosa acogida por parte de José Canó, padre del estelar ligamayorista Robinson Canó.
Campos permanecerá en la República Dominicana hasta que tenga 17 años. Por lo tanto, en este momento del próximo año, será elegible para competir en la liga de instrucción y posiblemente debutar profesionalmente en la Liga de la Costa del Golfo, según los reportes
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Esta fue la historia contada por ESPN Digital ese día de julio de 2016:
“Dos niños cubanos que participaban en un torneo de pequeñas ligas en República Dominicana, escaparon de la delegación, presuntamente acompañados por familiares adultos, informaron los organizadores del evento y la policía a ESPN Digital."
“Los hermanos Roberto y Raúl Campos Proenza, de 13 y 14 años, respectivamente, se separaron del resto de sus compañeros, el sábado, mientras celebraban la victoria en el partido por el campeonato de su categoría en el Torneo Internacional Punta Cana, que por sexto año consecutivo se realizó en el famoso balneario dominicano.
“Testigos informaron que los niños subieron a un vehículo todo terreno después de despedirse de sus amiguitos. Roberto, quien juega la tercera base, fue el Jugador Más Valioso de su categoría.
