* Por Samuel Díaz
Cuba es un paraje exótico para la realización de eventos de deportes extremos y otros que pongan a prueba la capacidad física del hombre. Sin embargo, al ente rector de esa área— el Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación (INDER) —, poco le interesa explotar esa bendición de la madre naturaleza y no promueve la práctica de estas actividades.
Tal es la apatía, que el pasado año cerraron en La Habana el Gym Club, sitio donde a diario practicaban Crossfit entre 500 y mil personas.
Pese a ello, el número de personas vinculadas al Crossfit y al Fitness se ha incrementado en el país en el último lustro, producto de la aparición de gimnasios privados.
Uno de ellos es el Pura Vida, radicado en el municipio Playa de la capital cubana, que apuesta por la actividad física participativa como estilo de vida.
Su directora, María Cleofas Buajasán, es del tipo de emprendedoras comprometidos con el desarrollo de la sociedad, por lo que ha involucrado a otros cuentapropistas, así como al personal y clientes de su gym en proyectos de saneamiento local, protección animal y desarrollo de los músculos.
El ejemplo más reciente fue el evento Fitness organizado en un área abandonada de la playa La Puntilla de Santa Fe, que contó con la colaboración de otros negocios particulares como Fluogram y Aires de Fiesta, junto a la Universidad de Deportes Manuel Fajardo, del Ministerio de Educación Superior.
Según María Cleofas “uno no puede estar al margen: aunque no recibamos apoyo financiero de las entidades gubernamentales, es necesario contar con ellos. Para esta actividad nos reunimos con el Poder Popular, la oficina del Inder y la Policía del municipio de Playa, en aras desocupar el área. Con ese apoyo nos bastó, pues lo demás lo logramos con recursos propios y la ayuda de sponsors e instituciones cuentapropistas amigas.
“Con la Universidad de Deportes ya teníamos firmado un convenio y habíamos desarrollado una clase de Zumba en un centro deportiva, y un curso de masajes en nuestro gimnasio”.
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Elena González, directora de Actividad Física en Pura Vida, refiere que el torneo Fitness fue la concreción de un sueño de mucho tiempo: “sabíamos la carencia de actividades de esta índole en Cuba, por lo que unimos varios gimnasios (de Spinet, Crossfit, de cardio) en una competencia no para medir los músculos de sus representantes, sino las habilidades y capacidades.
“El sitio lo elegimos mediante uno de nuestros directivos que estudió cerca, así que lo limpiamos, acondicionamos y señalizamos, para evidenciar que no se necesitan grandes recursos ni lugares turísticos”.
La prueba de resistencia fue corta pero exigente: 50 metros de nado y otros 100 de remo, una zona de obstáculos, zancadillas con pesas en las manos y una carrera final de 600 metros. En ella participaron 22 parejas mixtas gracias a la convocatoria realizada en otros gimnasios y la promoción en redes sociales.
Para Yandy Hernández, la cita fue una oportunidad de competir nuevamente junto a su hermana Lena: “es una lástima que no se impulsen estos torneos en el país, pues es una manera sana de divertirnos, conocer personas y medir nuestras capacidades.
“Nosotros no pertenecemos a ningún gimnasio, vimos el llamado por Facebook e incursionamos, pues antes éramos nadadores. Hoy ganamos, pero me emocionó más ver la alegría de la gente por la actividad y la buena vibra entre los competidores. Creo que este evento no tendrá freno alguno, pues está enfocado principalmente en lo social. Y claro que participaría de nuevo”, señala Élida Barrios tras recibir el diploma y la medalla de oro junto a su compañero de equipo Abel Hernández.
Tanto el Fitness como el Crossfit son modalidades deportivas muy practicadas en otras partes del mundo. México, Colombia, Estados Unidos y Venezuela, son algunos de los muchos países que organizan campeonatos nacionales e internacionales; sin embargo, Cuba, que tantos competidores aporta a estas lides debido al fenómeno migratorio, no tiene siquiera uno interno.
“Esa es una de nuestras metas, lograr primero un torneo de carácter nacional y luego hacerlo internacional, que incluya los mejores exponentes de cada nación. Sin dejar de soñar, hay que ir paso a paso, porque el contexto nuestro es diferente…”, afirma María Cleofas, directora de Pura Vida.
Una de las ventajas geográficas que tiene su gimnasio es la cercanía a los hoteles ubicados en el litoral norte del municipio Playa, por lo que en un futuro pudieran ofertarles un paquete recreativo a sus clientes, que incluya Fitness, Zumba, Yoga, etc. “Sería ideal, nosotros contamos con todo lo necesario y pudiéramos unirnos con varios emprendedores para ello. Basta que estén de acuerdo las instituciones estatales”— dice María Cleofas.
Mientras eso llega, su gimnasio previsto realizar actividades junto a la Universidad de Deportes para personas de la tercera edad, pues la población cubana cada día envejece más. La actitud de estos emprendedores demuestra cuánto se pudiera lograr en Cuba si se articulan estrategias conjuntas entre las instituciones estatales y el sector privado.