La justicia canadiense decidió, ayer 27 de mayo, que proseguirá con el proceso de extradición hacia Estados Unidos de Meng Wanzhou, directora financiera de Huawei. Esta decisión es el centro de una grave crisis diplomática entre China y Canadá.
Meng Wanzhou continuará bajo libertad condicional en espera de una nueva instancia en su proceso, así lo determinó la jueza Heather Holmes, de la Corte Suprema de Vancouver. Este pronunciamiento es una victoria para Estados Unidos en lo que sugiere ser toda una lucha legal contra el gigante chino de las telecomunicaciones.
Desde el 1ro de diciembre de 2018 la alta ejecutiva china, asociada al partido comunista de su país, fue arrestada en una escala en Vancouver. Su liberación bajo libertad condicional ha estado sujeta a estrictas medidas de confinamiento en su mansión local y al uso de una tobillera electrónica. Beijing pide su libertad desde ese entonces.
Para conseguir la extradición, Estados Unidos debe enjuiciarla por un delito también aplicable en su vecino del Norte. La razón que la pone frente a la justicia es la acusación de cometer fraude al mentir en un banco estadounidense, delito punible también en Canadá.
“Washington acusa a Meng de haber mentido al banco HSBC sobre la relación entre Huawei y Skycom, una subsidiaria que vendió equipos de telecomunicaciones a Irán, lo que expuso al banco a una eventual violación de las sanciones estadounidenses decretadas contra Teherán por su programa nuclear” expuso Infobae sobe el motivo de su apresamiento.
En una presentación de 2013 en Hong Kong. Meng informó a ejecutivos del banco que Huawei, la empresa de su padre, ya no poseía Skycom y había renunciado a su junta directiva. “Pero la fiscalía aduce que esa declaración fue engañosa, porque Huawei controlaba las operaciones de Skycom en Irán y mantenía el control de sus arcas”, refiere el medio de prensa antes mencionado.
Los abogados de Meng insistieron en su liberación alegando que este proceso incluye violaciones de las sanciones de Estados Unidos contra Irán, pero que en Canadá estas violaciones no estaban impuestas cuando se desarrollaron los presuntos delitos.
A partir de ahora las nuevas audiencias están programadas para el mes de septiembre. Si la alta ejecutiva de 48 años logra recuperar su libertad el Ministerio Público tendrá 30 días para apelar la decisión de la jueza Holmes. Es aconsejable que, en tal caso, Meng abandone el país.
La embajada china en Ottawa se pronunció como vocera de su gobierno y calificó el caso de un incidente político grave. Además, culpó a Estados Unidos de “derribar a Huawei” y a Canadá de ser “cómplice”. El país asiático considera la liberación de Meng como requisito indispensable para mejorar sus relaciones con Canadá y para liberar a dos canadienses que tiene detenidos bajo sospecha de espionaje.
Como parte de las sanciones de Estados Unidos a Huawei, el gobierno norteamericano modificó, hace unas semanas, una regla de exportación para bloquear el acceso directo de Huawei a los proveedores globales de chips. Es este otro paso más en la escalada de tensiones entre la nación americana y China.