El club de fútbol de Barcelona dio la nota negativa en la última jornada de la fase de grupos de la Champions League tras caer por goleada ante el Bayern y descender hasta la segunda competición del área, la Europa League.
El Barcelona no caía en una fase de grupos de la Champions, desde la temporada 2000-01. Exactamente, cuando apareció un jovencito de apellido Messi que vino a rescatar al club y sacarlo del lodo. Pero por el momento, no hay nadie de ese estirpe en el futuro inmediato de los culés.
“Esto es lo que hay", decía el defensa Gerard Piqué después de caer contra el Bayern de Múnich en el encuentro de ida. Esa era la triste realidad de uno de los mejores clubes del mundo.
En este choque en el frío Múnich, el Barcelona aguantó la primera media hora las llegadas rápidas de la delantera del team bávaro. Incluso tuvo ocasiones por la banda de Dembelé. Sin embargo, a raíz del 1-0 y sabiendo que el Benfica llevaba dos goles de ventaja en Lisboa, se derrumbó.
La pregunta ahora es si con eso que tienen, les da para ganar la Europa League, con un Sevilla también de regreso, pero que tiene más margen de mejoras que el propio club culé. Todavía deberán volver Pedri y Ansu Fati, si les alcanza para Europa League, todos los jueves.
Los rivales que van a quedar en la Europa League, no son poca cosa. Habrá equipos de alto nivel, como el Borussia Dortmund y el propio “rey de la competición”, el Sevilla. Luego hay un grupo de equipos con menos nombre no obstante que juegan bien como el Leipzig, West Ham, Real Sociedad, Betis. El Barcelona de Xavi no lo tiene fácil.
En relación con el Barza-Bayern, es la bestia negra del club de la ciudad condal. En la última década, se han enfrentado en siete ocasiones con un balance de seis victorias bávaras y solo una de los azulgranas.