Los aficionados al baloncesto en el sur de la Florida vieron renacer este fin de semana sus esperanzas de que el campeonato de la NBA regrese al estado en manos del Miami Heat.
Jimmy Butler se sobrepuso a las ausencias de Bam Adebayo y Goran Dragic y guio a los suyos a un triunfo 115-104 sobre Los Ángeles Lakers de LeBron James, al conseguir 40 puntos, 11 rebotes y 13 asistencias en el tercer partido de las Finales.
La victoria no solo significó mantener con vida a un mermado Heat, sino que fue solo la tercera ocasión en que un jugador registra un triple-doble (al menos 10 unidades en 3 apartados estadísticos) de 40 puntos en un partido de Finales.
Asimismo, de acuerdo con Elias Sports Bureau, por primera vez en una serie de campeonato que haya contado con la presencia de James, un jugador lo supera en puntos, rebotes y asistencias en un mismo partido.
Todo eso y más logro Butler: luego de que Miami perdiese una ventaja de doble dígito en el último cuarto, Butler esquivó varias veces la dura defensa de James y mantuvo a flote a su equipo.
La última ocasión en que Miami estuvo 2-0 debajo en unas finales fue en 2006, cuando Dwyane Wade —también egresado de la universidad de Marquette como Butler— tomó el liderato para una remontada sobre Dallas Mavericks y el primer campeonato de la franquicia.
¿Qué necesita Miami para poder vencer una vez más a los Lakers e intentar otra remontada histórica?
Disminuir a Davis
El pívot de los Lakers es, hasta el momento, el principal candidato al Jugador Más Valioso de las Finales, tras promediar 33 puntos, 11.5 rebotes y efectividad de 63.4% en tiros durante los primeros dos choques.
Sin embargo, una inteligente defensiva del Heat obligó a Davis a cometer dos tempranas faltas ofensivas antes de que pudiese anotar un solo punto o conseguir un rebote.
El resultado fue que el 7 veces All-Star terminó con 15 puntos y 5 rebotes en 33 minutos sobre la cancha el domingo, así como con un total de 5 pérdidas, con un balance positivo (+26) para sus rivales cuando estuvo en el terreno.
Atacar desde temprano a Davis y dividir entre varios hombres la tarea de defenderle, podría ayudar al Heat a garantizar una paridad en la zona pintada que les permita atacar mejor.
De acuerdo con la estadística oficial de la competencia, en los partidos en que Davis cometió 4 faltas los Lakers registraron marca de 7 victorias y 6 derrotas, mientras que 2 de las únicas 4 caídas de estos en la postemporada han sido en igual situación.
Adiós a la zona
Un cambio fundamental con respecto al segundo partido fue la elección de la defensa por parte de Miami. Si bien la zona 2-3 rindió dividendos en la Final de Conferencia ante Boston Celtics, los experimentados Lakers la descifraron a placer en los primeros partidos.
El Heat pasó de jugar 72 posesiones con defensa zonal en el juego 2 a solo tres el domingo, según reporta The Athletic, lo cual garantizó que Davis tomara solo 3 tiros en la pintura en el tercer partido, tras convertir 19 de 28 en los primeros.
“Creo que todos podemos estar de acuerdo en que fue una excelente decisión por parte del entrenador”, dijo Butler al término del partido. “Pusimos cuerpo con cuerpo… capturamos rebotes. Le dificultamos muchísimo las cosas”, agregó.
Este cambio estratégico podría resultar decisivo ante la posible recuperación de un hombre clave para ellos.
El regreso de Adebayo
Aunque el entrenador de los Lakers, Frank Vogel, es lo suficientemente capaz para recomponer su ataque y hacer jugar mejor a su equipo este miércoles en el cuarto partido, la reincorporación del pívot Bam Adebayo podría ser vital en los propósitos del Heat.
Aquejado de lesiones en un hombro y el cuello, el joven Adebayo no ha podido aportarle mucho a Miami en estas finales, pero un posible regreso el miércoles le daría al equipo de Florida la pieza que les falta, ahora que encontraron la estrategia correcta.
Adebayo no solo será una constante amenaza en ataque en la pintura, sino que ofrece otro par de manos útiles para intentar detener a Davis, junto con Andre Iguodala, Jae Crowder y Kelly Olynyk.
“Estamos aquí para competir”, dijo Butler al final del juego 2. “Vamos a volver a pelear y empataremos la serie 2-2”, aseguró, tras el choque que podría haber dejado al descubierto para Miami el camino al éxito.