La más reciente jornada del béisbol de Grandes Ligas, ya próximo al final de la temporada, sirvió para que dos lanzadores nacidos en la isla ampliasen la historia que prestigia a la pelota cubana.
En el partido que definió el pase de los Dodgers de Los Ángeles a la Serie de Campeonato de la Liga Nacional, tras vencer 12-3 a los Padres de San Diego, Adrián Morejón se convirtió en el pitcher cubano más joven en iniciar un partido de postemporada.
A sus 21 años y 244 días, el zurdo rompió la anterior marca en poder de Liván Hernández (22 años y 234 días), fijada en 1997, una época donde los peloteros cubanos no salían de la isla a tan temprana edad, de manera general.
Sin embargo, la superioridad de los Dodgers como equipo de sobrada experiencia en postemporadas terminó imponiéndose sobre los Padres y el joven Morejón, quien fue el lanzador que más trabajó de los 11 que vieron acción por su equipo.
En 2 entradas de labor, permitió 3 carreras, 2 jits, cedió par de boletos, un pelotazo y un wild pitch, mientras que logró ponchar a 2 rivales.
A pesar de la derrota, su primera en postemporada, el solo haber subido al montículo como abridor en esta instancia podría ser una experiencia única para un lanzador cubano de su generación y deja claras las intenciones de los Padres para con el cubano.
En total, Adrián Morejón trabajó 5 entradas en los playoffs, con 3 carreras permitidas e igual número de imparables recibidos, 4 ponches, promedio de 5.40 limpias y un WHIP de 1.00.
Por otra parte, un trío de cubanos continúa enfrascado en la que ha sido hasta el momento la mejor serie de postemporada, disputada entre Yanquis de Nueva York y Rayas de Tampa Bay, una rivalidad que promete grandes desafíos en años por venir.
Este jueves, los Bombarderos del Bronx vencieron 5-1 a los de la Florida, forzando así un quinto y definitivo choque pactado para este viernes, aprovechando un cierre histórico para el cubano Aroldis Chapman.
El holguinero retiró a 4 bateadores rivales, con 2 ponches y una base por bolas, todo con solo 23 lanzamientos al borde de las 100 millas por hora.
La actuación significó su primer salvamento de la presente postemporada y sirvió para inscribir su nombre en un ilustre club de cerradores en MLB, siendo el séptimo que llega a los 10 salvamentos en playoffs.
La lista, que lidera la leyenda Mariano Rivera con unos inalcanzables 42 rescates, podría ver a Chapman ubicado quinto al final de esta postemporada, bien cerca de Dennis Eckersley, quien ocupa la cuarta plaza con 15.
Sin embargo, con su décimo salvamento Chapman se convirtió en el primer pitcher zurdo en llegar a la decena en postemporada, un club exclusivo para el cubano y que deberá liderar por un buen tiempo cuando ponga fin a su carrera.
El segundo bateador a quien debió enfrentar el Misil Cubano fue su compatriota Randy Arozarena, a quien ponchó con tres rectas —la última de ellas de 100 millas— antes de intercambiar miradas de rivalidad.
Arozarena, quien está teniendo una postemporada de ensueño para las Rayas, falló en 4 turnos este jueves y detuvo en 5 la racha de partidos consecutivos con jits y extrabases.
La buena noticia para Tampa fue que el infielder Yandy Díaz consiguió su primer imparable de la postemporada en 4 turnos, mientras que atrapó su cuarto boleto y mantiene su útil habilidad de embasarse.
Cuba espera ansiosa el resultado del partido de este viernes, el cual permitirá, sea cual sea el desenlace, el enfrentamiento entre cubanos, pues los Astros de Yuli Gurriel y Aledmys Díaz esperan al ganador para la Serie de Campeonato de la Liga Americana.
