La final de Copa América entre Brasil y Argentina plantea varios retos, pero es una final soñada, un clásico del fútbol. Además juntará a dos de los mejores futbolistas del mundo, Lionel Messi y Neymar Jr.
Messi, quizás más presionado, pues tienen que ganarle a una Selección a la que no ganan, en choque oficial, desde 2005, además de que se jugará en el mismo lugar donde perdieron la final del Mundial de 2014, el Maracaná.
No será la primera final entre ambos en la historia de su centenaria rivalidad. La primera finalísima que jugaron fue en la lejanísima Copa América 1937, que se jugó, y fue ganada, en y por Argentina. A partir de ese día, hace 84 años, los brasileños le han ganado todo, en cuanto a finales, a Argentina: dos Copas Américas (2004 y 2007) y una Copa Confederaciones (2005). Esta será la quinta final entre ambos.
De esas cuatro finales, una ya fue jugada por Lionel Messi, la de la Copa América de 2007. Allí la verdeamarella venció 3-0 con el astro rosarino en el césped como titular. Las últimas seis veces que hubo cruce de eliminatoria directa, los ganó Brasil. En fin que las estadísticas favorecen al pentacampeón del mundo.
En total, se registran 107 enfrentamientos en toda su historia conjunta. Brasil ganó 42 partidos; Argentina fue el mejor en 40; y se cuentan 25 empates. Solo por Copa América, Brasil no pierde con su rival desde hace seis torneos. El último triunfo albiceleste data de 1991. O sea hace 16 años que Argentina no le gana a Brasil en partido oficial. Contra todo esto tendrán que pelear Messi y compañía.
El capitán de Argentina tiene un doble reto: romper la racha de 28 años de sequía de títulos de la Albiceleste, que no gana nada de forma absoluta desde la Copa América 1993. Además de tener la oportunidad de tomar revancha de la final que perdió frente a Alemania en el 2014 en ese mismo estadio.
