El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, reveló que muchos médicos cubanos en ese país realizan su labor en hospitales militares.
Según el mandatario, del izquierdista partido Movimiento Regeneración Nacional (MORENA), el gobierno pidió ayuda a la Marina y el Ejército para realizar la atención a los enfermos del coronavirus, y los médicos cubanos fueron instalados en los hospitales de ambas instituciones militares.
Obrador también agradeció la labor de los galenos, unos 500, que México contrató para atajar la escalada de la pandemia en la capital, la zona con más infestaciones diarias.
Aseguró que van a crecer los ingresos de médicos a especialidades y que van a entregar apoyo y becas para que estudien en el extranjero y se formen como especialistas.
Puso como ejemplo de la precariedad del cuerpo médico en México el caso del nuevo hospital del Instituto del Seguro Social, con una capacidad de más de 300 camas y equipado con todo, pero sin los suficientes médicos ni especialistas. “Es decir, tenemos el equipo, el hospital moderno, pero no el personal”.
Reveló que todos los días están convocando a quienes quieran trabajar allí, pero solo han logrado poner a funcionar 120 camas de 300, por falta de médicos generales y especializados.
El gobierno de la Ciudad de México —capital— hizo una convocatoria urgente a especialistas extranjeros de la salud en diciembre, cuando se dispararon los contagios por las fiestas decembrinas y la infraestructura hospitalaria sobrepasó el 75% de su capacidad de ingreso.
En abril, el gobierno de la Ciudad de México contrató a unos 600 especialistas cubanos de la salud para ayudar en el enfrentamiento a la temida enfermedad.
El pasado 24 de abril, la Secretaría de Salud federal publicó en el Diario Oficial de la Federación (DOF) un acuerdo donde establecía que "por el tiempo que dure la emergencia sanitaria generada por el virus SARS-CoV-2" se podrían contratar "personal profesional de la salud con formación en el extranjero".
El 8 de abril, la Cancillería de México informó del arribo de 10 expertos cubanos para evaluar la pandemia del COVID-19 pero sin prestar "servicios médicos a la población".
La "solidaridad médica" es un gran negocio para el régimen cubano, que se queda con hasta el 70% del salario que pagan a los trabajadores de la salud en el extranjero.
Durante las últimas semanas, brigadas de personal médico cubano han acudido a 15 países para ayudar a contener la expansión del coronavirus y 2019 cerró con 28 000 cooperantes en 61 países.
En 2018, único año en el que el gobierno dio detalles de lo que ingresa, la isla obtuvo 6400 millones de dólares por este concepto.