El doctor cubano Manuel Guerra, quien llegó recientemente a Estados Unidos, contó en redes sociales la experiencia de su visita a una clínica en la Florida para realizarse exámenes junto a su esposa.
Según explicó en su perfil de Facebook, todos los exámenes fueron gratuitos, y lo que más le sorprendió fue lo surtida que estaba la farmacia de la clínica.
"Entre tantas cosas que me sorprendieron dentro de aquel maravilloso lugar que nada tiene que ver con un hospital en Cuba, ganó marcada connotación su farmacia interna. Había medicamentos de toda clase. Desde el analgésico más común hasta el barbitúrico menos utilizado en la práctica cotidiana estaba allí. Todos en sus filas e hileras bien organizados. Sentía que me saludaban cual si estuviesen en presencia de un desconocido, pues sinceramente, de muchos de estos fármacos sabía solo gracias a la literatura y con mucho escepticismo contemplaba su existencia; ya había llegado a pensar que los mismos solo formaban parte de una leyenda", agregó.
Guerra reconoció haber sido víctima de adoctrinamiento por parte del régimen cubano, a tal punto que llegó a considerar normal la escasez de medicamentos en la Isla.
"¿La justificación? pues la de siempre, el dichoso embargo. Que me digan loco, pero aún no hace un año que la dictadura, en pleno pico pandémico y padeciendo la mayor crisis económica de las últimas tres décadas, importó más de 800 automóviles para el turismo, bien que podían haber aprovechado y haber traído algunos medicamentos utilizando el mismo transporte, pero claro, bien conocemos las prioridades del régimen", recordó el doctor cubano.
"El caso es que mientras ellos se perpetúan en el poder, en Cuba solo pasa una cosa: la vida. Duele lo que sucede en mi nación, duele lo que sufren mis hermanos. Di basta cubano, en tus manos está el cambio", concluyó.
El doctor Guerra llegó a EE.UU en marzo de 2022, tras semanas de travesía por Centroamérica y México.
"A Dios gracias, llegamos...Noche fría, trayecto más que complejo y el desierto de Arizona que para colmo asedia nuestra integridad física, mas no nos importa; el aire que se respira tiene aroma a libertad", escribió el 19 de marzo en un post de Facebook.
Mientras estuvo en Cuba, Guerra fue una de las voces opositoras más incómodas para el régimen de La Habana. Tras su participación en las manifestaciones antigubernamentales del 11 de julio de 2021, las amenazas con llevarlo a prisión se hicieron más fuertes.
El pasado 20 de octubre, Guerra había sido expulsado de su centro de trabajo, el Hospital Municipal Nicodemus Regalado, en la provincia Holguín. Allí se desempeñaba como especialista en ginecología y obstetricia, con excelentes resultados, acreditados por las evaluaciones de sus superiores.
Desde 2020, la Seguridad del Estado acosaba a Guerra por su postura crítica con el gobierno.