También conocidas como las bolas Ben Wa, las bolas chinas son un mecanismo formado por dos bolas unidas entre ellas por un cordel, cada una de ellas, en su interior contiene una bolita más pequeña que al chocar contra las paredes produce una vibración. Y aquí el secreto… pues esta vibración, que se produce cuando la mujer está en movimiento (no sirve de nada estar sentada o tumbada), provoca una contracción involuntaria y continua de los músculos del suelo pélvico, que produce un aumento de la irrigación sanguínea, la lubricación y el tono muscular.
Bolas chinas y beneficios para la vida sexual
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Las bolas chinas tienen una función de “pesa” fortaleciendo la musculatura pélvica.
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Mejoran la fase del deseo; llevar las bolas chinas puede resultar muy erótico, como llevar lencería sexy.
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A muchas mujeres les ayuda a fantasear el llevar unas bolas chinas sin que nadie lo sepa.
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Mejora de la lubricación: las bolas contienen otras pequeñas bolitas en el interior que se mueven y estimulan las paredes de la vagina, favoreciendo el flujo sanguíneo y mejorando notable e instantáneamente los niveles de lubricación .
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La musculatura pélvica se contrae y relaja durante el orgasmo y, tanto los ejercicios de suelo pélvico activos como el uso de las bolas chinas, fortalecen la musculatura haciendo los orgasmos más intensos y largos.
Ben Wa Balls vs. Ejercicios de Kegel
El piso pélvico, al igual que todos los músculos esqueléticos, consiste en fibras voluntarias e involuntarias. Las fibras involuntarias del piso pélvico son aquellas activadas sin que nosotros demos la orden de hacerlo, como cuando estornudamos.
Las bolas Ben Wa, cuando se usan en movimiento (al caminar), activan estas fibras, ya que la vibración producida en las paredes de la vagina causa pequeñas contracciones involuntarias. Además, los ejercicios de bajo impacto, debido a la relación sinérgica entre los músculos del piso abdominal y pélvico, también permiten que se activen fibras involuntarias.
En cambio, los ejercicios de Kegel se realizan conscientemente. Por tanto estos ejercicios trabajan las fibras voluntarias del piso pélvico. Se usan diferentes tipos de ejercicios Kegels para tensar el piso pélvico, mientras que los Kegels inversos se usan para relajarlo.
Las bolas Ben Wa son pesas que se insertan en la vagina y usan las vibraciones en su movimiento para crear contracciones en las fibras involuntarias. Esto funciona de manera efectiva para apretar el piso pélvico y las paredes de la vagina.
Los ejercicios de baja presión son tipos de ejercicios de respiración que también se usan para tonificar el piso pélvico. Tienen una segunda función que permite aliviar la presión sobre el piso pélvico moviendo los órganos internos hacia arriba dentro de su caja torácica. Algunos productos vienen además con una guía de ejercicios Kegel que se pueden realizar en combinación con las bolas chinas y mejorar el suelo pélvico de forma más efectiva.
¿Cómo elegir las bolas chinas?
- Tamaño. El estándar son 35mm, aunque podrás encontrar modelos más pequeños para mujeres con vaginas mas estrechas o pequeñas. Lo que es importante es que la bola o bolas se mantengan colocadas a el interior de la vagina y que la vibración se transmita a las paredes vaginales.
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Peso. Es importante empezar con un peso que permita mantener la bola/as en el interior sin problemas, ya que si utilizas unas bolas muy pesadas, estas saldrán con facilidad y te sentirás frustrada con la terapia, además su eficacia no se basa en el peso. Si hay mucha debilidad muscular y no eres capaz de aguantar una bola, sería ideal que empezaras una rutina de ejercicios de Kegel (puedes colocar la bola china en el interior de la vagina y realiza las contracciones) para ir adquiriendo tono muscular y conciencia de la zona y los músculos a trabajar, hasta que seas capaz de aguantar la bola china y entonces realizar la terapia.
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Tiempo. Comienza por unos minutos diarios para ir aumentando progresivamente hasta llegar a trabajar con ellas unas 1-2 horas.
Precios de las Bolas Chinas
Los precios de las bolas chinas suelen varias entre 9 dólares hasta 30 dólares. Depende de la calidad del producto, la durabilidad o el país de origen. Siempre es importante observar los materiales de fabricación para evitar reacciones alérgicas.
Y es que sus beneficios no solo prometen mejoras en tus relaciones sexuales sino que además resultan ser un ejercicio físico para tu suelo pélvico que te ofrecerá a futuro gozar de una mejor vida sexual además de prevenir incontinencia urinaria durante la tercera edad.
Si tienes dudas asiste a un sexólogo especializado y matriculado para poder quitarte todas las dudas y hacer uso de este objeto tan “peculiar” pero prometedor.
