Los Pichy Boys, el dúo de humoristas cubanos radicados en Miami, están entre las primeras figuras públicas en critica el arresto del influencer conocido como Kende de Cayo Hueso, un joven de apenas 17 años, por filmar un video desde la azotea de su casa.
Muchos vecinos se aglomeraron en el edificio donde vive el joven durante la filmación —barrio de Cayo Hueso, en Centro Habana—, por lo que la policía del régimen lo arrestó por “propagación de epidemia”.
“En la unidad de policía determinaron la sanción de 500 pesos de fianza y los mandaron para su casa a él y un amigo. El mismo día volvieron a detenerlos alegando que las medidas eran muy suaves y hasta mañana están a disposición de la justicia para aplicarles otra sanción que podría ser privación de libertad”, declaró el grupo humorística en Instagram.
“Un muchacho de 17 años que ha logrado alegrar el día de muchas personas y es un ejemplo de superación para los jóvenes, ahora amenazan con apagar esa sonrisa. Si alguna vez te reíste con sus ocurrencias, si viste en él un patrón a seguir por la juventud cubana, si no estás de acuerdo con la injusticia que se está cometiendo por un error que cometería cualquier joven, entonces comenta y comparte”, agregaron.
En las redes sociales del joven de 17 años, su familia y amigos han hecho la denuncia que ya ha sido respaldada por celebridades como los reguetoneros Yomil y el Dany y que toma fuerza con la etiqueta #freeKende.
Este sábado, se refirieron al caso del joven sin mencionarlo en el Noticiero Nacional de la Televisión Cubana. El medio de prensa estatal, informó que alrededor de 30 personas han sido acusadas de “propagar la epidemia” en Cuba del coronavirus este fin de semana, y todo debido a la grabación de un video que pretendían hacer en la azotea de un edificio en Centro Habana.
Luego de recibir “una denuncia de la población” en la tarde del viernes 26 de junio la Policía Nacional Revolucionaria (PNR) “detectó” la reunión en la que se “violaban las medidas higiénico sanitarias dispuestas para el enfrentamiento a la COVID-19”.
Participaban en la grabación de un video en la azotea de un edificio ubicado en calle Valle, entre Espada y Hospital, en el barrio de Cayo Hueso. Durante la reunión del Consejo de Defensa de La Habana, realizada el sábado se aseguró que “el actuar de la policía fue para preservar la salud del pueblo”.
En el reporte oficial, sin ampliar en detalles, se aseguró que serán procesados ante los tribunales por el delito de propagación de epidemia, según lo estipulado en el Código Penal cubano, en su artículo 187.