El rey de los reparteros, el reguetonero cubano Yosvanis Sierra Hernández, más conocido como Chocolate MC, se derrumbó en plena entrevista con el youtuber cubano Adrián Fernández y se echó a llorar.
“De pi…mi hermano, es que me da una roña todo esto. Está bien mi hermano, vamos a dejar esto aquí. No es fácil, me da una roña todo esto brother. Uno se ríe para no llorar, pero a veces te gana, hay veces que te desmoronas”, aseguraba el músico mientras se secaba las lágrimas en la transmisión.
Chocolate agregaba que “era demasiado” lo que él soportaba. “La gente no te deja brother, si yo lo único que he hecho aquí es luchar en mi carrera yo solo. Esperen música mía, no me voy a retirar de esto”, añadía.
Unas horas antes, el intérprete de “Bajanda” anunciaba en sus redes sociales que se alejaría un tiempo del mundillo de la música. Chocolate dijo que estaría creando algunos temas para su nuevo disco y luego de eso “desaparecería un rato”. Agregó que estaba haciendo otro álbum junto a una artista sorpresa.
“Después de estos dos CD que vienen me tomaré un descanso pues me siento un poco agotado de este mundo de la música pues ya son 13 años dando de qué hablar”, había escrito el reguetonero en una de sus historias. Además de los dos proyectos antes mencionados estaría lanzando otro disco junto a Orlenis 22k llamado el “Manda Pin”.
El músico hace apenas un mes que salió de prisión y en su último concierto en Tampa, esta semana, volvió a efectuarse una pelea a golpes. Esta vez él no estuvo involucrado, pero sí los asistentes al mismo. Quizás el “Choco” se ha cansado de una vez y por todas de ese “mal ambiente” que nada aporta a su larga carrera musical.
Chocolate fue arrestado en el mes de junio y pasó varios meses en prisión por una acusación de lesiones a una mujer. Esta no sería la primera vez del reguetonero en las cárceles de Estados Unidos.
En junio de 2017, Chocolate fue denunciado por violencia doméstica, por su ex pareja Cynthia Cortés. Lo llevaron a la cárcel y debió pagar una fianza de 170 mil dólares. También lo detuvieron en marzo del 2018, en Nuevo México, funcionarios de inmigración por no llevar la documentación requerida. En el 2019 fue arrestado en Houston, Texas, por un accidente de tránsito tras el que le encontraron “sustancias no controladas”.