"Esto estuvo bastante tenso porque no nos evacuaron, tuve que quedarme aquí con los niños", indica una madre cubana que vivió con ansiedad los días del huracán Laura.
El pasillo donde viven, dice, se inunda, así que entra el agua para las casas", lamenta la mujer, que dice haberlo pasado con mucho susto porque el estado constructivo de estas viviendas deja mucho que desear.
Solo evacuaron, de acuerdo con lo expresado por esta madre ante las cámaras de Cubanet, a dos personas, que no obstante fueron enviadas de regreso durante la misma noche, indica.
Valora que si hubiera pasado algo grave en relación con la vivienda, todos hubieran estado en peligro por la corta duración de la evacuación en un momento tan tenso para estas familias.
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La mujer, con una niña de siete meses y otro hijo, ha tenido que enfrentar huracán y pandemia.
"No tengo ni para dónde ir". "Esto no tiene explicación"... "Por lo menos yo no puedo seguir pariendo", dice en referencia a la política pública de natalidad que mantiene el país para contrarrestar el envejecimiento poblacional.
Aún a sabiendas de que su situación era difícil para traer otra vida al país, la madre cuenta que las autoridades sanitarias de su área le insistieron en que debía continuar con el embaraza.
Ahora, en plena pandemia, no la consideran como caso social y tiene que lidiar con las mismas colas que el resto de la población. No obstante, sus vecinos la ayudan en este sentido.
Pero ayuda institucional, denuncia ella, no ha recibido ninguna.
