Ante la falta de noticias sobre el estado de salud del preso político Silverio Portal Contreras, su esposa exigió hoy al régimen constancia de su fe de vida.
"Yo le pido al régimen fe de vida de mi marido, porque ya no estoy segura de que Silverio esté vivo", dijo González.
El opositor cubano fue internado la semana pasada por problemas de hipertensión arterial en la enfermería de la prisión 1580 en San Miguel del Padrón en la capital de la Isla.
Según informaciones de Radio Televisión Martí, uno de los reos que acompaña a Portal dijo a Lucinda González Gómez que lo habían amenazado con dejarle estar "un año sin derecho a llamadas telefónicas" por sacar denuncias de la cárcel", razón por la cual se descompensó su presión.
Recientemente González Gómez enunció abusos cometidos contra Silverio en la prisión donde se encuentra. Según una publicación realizada en su perfil de Facebook, el opositor “fue llevado para enfermería con la presión alta (280 con 130) debido a una fuerte discusión con una señora que le dijo que era fiscal y el represor que lo reprime dentro de la prisión (PEDRO)”.
"Que lo estén torturando hasta causarle la muerte, es lo que estoy pensando yo" que está sucediendo, expresó González Gómez a Radio Martí.
En febrero fue la última vez que Lucinda pudo visitar a su esposo y teme que quien le llama de la cárcel no sea Silverio. Ella contó al medio de prensa que cuando escucha las grabaciones le parece que la voz es de otra persona: "Me puse a oírlo bien y la voz me es confusa”.
“Lo están matando en esa mazmorra castro-comunista, lo están torturando, pero ni Silverio ni yo claudicaremos, la seguridad del estado, el régimen totalitario y dictador, los represores Pedro y el mayor Seull, el teniente coronel Leyva y hasta el propio Raúl Castro serán responsables de lo que a Silverio Portal Contrera le suceda”, afirmó Gónzalez, a la vez que reclamó: “libertad inmediata para todos los presos políticos”.
La situación de salud de Silverio es delicada y la pérdida total de la visión es inminente luego de una golpiza que le propinaron los carceleros y que le hizo perder la visión de uno de sus ojos. Su esposa asegura que en varias visitas a la prisión le han impedido dejar medicamentos a pesar de que el preso de conciencia los necesita para el corazón y la hipertensión y “tiene que tomar una aspirina diaria, que no hay en la prisión, y que tampoco querían dejar pasar”, explicó González Gómez.
A inicios de julio la activista solicitó la sentencia de su esposo, quien lleva más de dos años recluido arbitrariamente, con el objetivo de hacer una revisión de causa y mandarla a abogados internacionales para ver cómo se canaliza la libertad del cubano.
Portal Contreras cumple sentencia de cuatro años por supuesto desacato y desorden público, pues protestó ante la incapacidad del gobierno cubano para arreglar edificios en ruinas.
